Editores piden mayores inversiones en el sector público para "subsanar" los problemas estructurales del sector

Actualizado: domingo, 23 abril 2006 16:00


MADRID, 23 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Federación de Gremios de Editores de España, denunció hoy, con motivo del Día del Libro, que nuestro sector editorial sufre un "retraso" respecto a otros países, debido a la falta de inversión en el sector público, al lento crecimiento del comercio literario, así como, a "erróneas políticas estatales" sobre la gratuidad en los manuales de texto, que deben ser subsanadas para que el sector pueda evolucionar.

En declaraciones a Europa Press Televisión, el director Ejecutivo de la Federación de Gremios de Editores, Antonio María Ávila, aseguró que la situación por la que atraviesa el sector es una realidad "compleja". "La industria editorial vive una situación compleja, porque, aunque es una industria madura y en crecimiento, éste debería de ser mayor de acuerdo con los índices económicos y sociales nuestro país, y si no evoluciona es debido a problemas estructurales que se arrastran del pasado y que obliga a España a vivir una situación de retraso", apuntó.

En este sentido, explicó que este retraso se debe "a la falta de inversión del sector público, ya que en los sistemas bibliotecarios existen unas deficiencias muy grandes y España está muy alejada de la media europea". Para solucionar este problema, reclamó "mayores dotaciones económicas".

"Además -continuó el director-, se está empezando a implantar políticas incoherentes, como el servicio de préstamo de libros escolares en varias comunidades españolas, que se hace pasar por políticas de gratuidad de los libros, pero que tendrá graves perjuicios pedagógicos para los niños".

GRATUIDAD DE LOS MANUALES DE TEXTOS

Ante la polémica suscitada acerca de las políticas de gratuidad de los manuales de texto, Antonio María, afirmó que la Federación no está en contra de este tipo de medidas, pero difiere en el sistema de implantación. "La gratuidad de los libros escolares es una decisión política, nosotros estamos de acuerdo y respetamos esa decisión, pero lo que cuestionamos es el modelo", añadió.

"El servicio de préstamo que se está implantando en varias comunidades españolas impide el uso del libro por parte del niño durante el tiempo que lo tiene en su poder. Si al cabo de cuatro años el libro está intacto es que no ha sido usado, y esto supondría una catástrofe pedagógica", precisó.

De esta manera, desde la Federación se apuesta por utilizar otro sistema como el modelo del cheque-libro, "en el que el Estado asegura el uso de los libros básicos, y los manuales serían de los niños y éstos se podrían usar".

El director y portavoz del Gremio de Editores aseguró que su federación "no reclama más ayudas" de la Administración, sino que sólo pide que se mejoren los servicios públicos. "El sector editorial no pide más ayudas, asumimos que es una de las industrias menos subvencionadas de nuestro país; pero lo que deseamos es que funcionen mejor los servicios públicos, una mejor educación, una buena inversión en las bibliotecas y poder disponer de una legislación razonable", explicó.

Finalmente, ante el proyecto de ley que en materia de lectura, libro y biblioteca desea implantar el Ejecutivo, desde el Gremio afirmaron sentirse "esperanzados". "Esperamos que la nueva ley mantenga el sistema tradicional de comercio del libro en España y suponga un revulsivo para instalar la lectura en la sociedad y que permita mejorar nuestro sistema bibliotecario", concluyó.