Juan José Sebreli desmota los mitos de Gardel, Evita, El Ché y Maradona en 'Comediantes y mártires'

EP
Actualizado: miércoles, 12 noviembre 2008 11:22


MADRID, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -

El escritor y ensayista argentino Juan José Sebreli desmonta los mitos creados en torno a Gardel, Evita Perón, el Ché Guevara y Maradona en su ensayo 'Comediantes y mártires' (Debate), "creados en Argentina pero con alcance mundial". Para Sebreli, "el motivo de que los jóvenes lleven camisetas del Ché sin saber quién es denota una insatisfacción que tratan de llenar con estos falsos dioses encarnados".

El escritor destaca que su obra, que ha sido galardonada Primer Premio de Ensayo Debate-Casa de América 2008, describe las trayectorias vitales "de los cuatro nombres argentinos más nombrados en Internet" así como sus características personales entre las que destaca "la voluntad insoslayable de ser geniales o de llegar a serlo, algo común a todos ellos".

Sin embargo, Sebreli sostuvo que no es la primera vez que se acerca a esta "temática iconoclasta", de la que ha estado escribiendo a lo largo de sus 50 años como escritor. Cuenta de ello es su libro 'Buenos aires, vida cotidiana y alienación', escrito en el 64, en el que dedicaba un capítulo a Evita, y otro, 'La era del fútbol' (1998), sobre Maradona. "Supongo que 'Comediantes y mártires' es como los nenúfares de Monet: variaciones sobre un mismo tema", comentó.

MITOS ARGENTINOS: TEMA TABÚ

El autor ironizó en torno a la decisión tomada por la presidenta de Argentina, Cristina Kirchner, de utilizar a estos cuatro personajes para patrocinar al país en la Feria de Frankfurt del año que viene. "Esta decisión la tomó días después de que los medios de comunicación se hiciesen eco de este premio que recibió mi ensayo, por lo cual supongo que es su réplica personal a este libro que seguramente vaya a causar escozor en mi país", sentenció. Este contraataque no extrañó al escritor quien explicó que "los ídolos son un tema tabú, seres intocables entronizados por los gobiernos".

Por otro lado, Sebreli explicó que, "desde que son pequeños, todos los personajes convertidos en mito sueñan con ser algo distinto de lo que son pero, esa voluntad de ser geniales se ve también condicionada por una circunstancia histórica adecuada y por el azar de los encuentros. De esta forma, Sebreli indicó que si Evita no se hubiese encontrado con Perón, seguramente su testimonio se hubiese reducido a una mínima reseña en un libro erudito sobre cine argentino; o El Ché, si no hubiese conocido en México a Fidel, probablemente se habría marchado con una beca a estudiar medicina a París, que es lo que quería hacer.

NACIONALISMO Y POPULISMO

El también autor del ensayo sobre la filosofía del siglo XX, 'El olvido de la razón' (2007) critica y derrumba el nacionalismo que sustenta a estas figuras. Así, Sebreli explicó que Gardel, que para empezar nació en Francia, no fue un fenómeno en toda Argentina sino en Río de la Plata, esto es en Buenos Aires y Montevideo. Además, Gardel empezó a viajar por toda Europa y se sentía más cómodo en París y Nueva York, donde cosechó gran éxito.

En esta misma línea, el autor destacó que el Ché que consideró más como "un héroe cubano", donde menos tiempo pasó fue en Argentina, "porque, a pesar de querer llevar a cabo ahí su revolución, nunca llegó a hacerlo", señaló. Sebreli desarticuló todo lo que de patriótico podía rodear a Maradona, "que se convirtió en un ídolo en Nápoles, donde era conocida su relación con la Camorra, y de donde tuvo que huir perseguido por la policía por este motivo. Cuando llegó a Argentina tampoco jugó mucho más al fútbol pero consiguió convertirse en un héroe mediático gracias al telefútbol", añadió.

Pero los mitos no son figuras que permanezcan inamovibles. Ejemplo de ello es para Sebreli, Evita, que pasó de ser un mito de la juventud montonera, guerrillera, en los años 70, a una mujer académica objeto de cientos de tesis doctorales; a la Evita "frívola" de los medios culturales.

Los mitos siguen vivos y se conforman más allá de su muerte, sobre todo porque dan mucho dinero, señaló el ensayista quien recordó los avatares de los restos de Evita que estuvieron 20 años dando vueltas de un lado a otro, cuando la actividad política de esta mujer había durado la mitad de tiempo, o la cantidad de merchandising montado alrededor de la figura del Ché. Muchos jóvenes llevan una camiseta con la cara del Ché y no tienen ni idea de quien era él realmente.

El escritor atribuyó al sistema educativo basado en próceres propiciado por el gobierno argentino en el siglo XIX, el germen de los mitos populares en el siglo XX. "En la actualidad, una sociedad democrática e igualitaria de hombres libres y responsables no debería poner en manos de los ídolos su propio destino", concluyó.