VALLADOLID, 14 Ago. (EUROPA PRESS) -
Consternación, incredulidad y rabia eran los sentimientos que se mezclaban entre los más de doscientos seguidores y fans que se encontraban en las inmediaciones del estadio José Zorrilla de Valladolid tras conocer la cancelación del concierto que la banda The Rolling Stones iba a celebrar hoy en la capital vallisoletana.
Según pudo constatar Europa Press en ese lugar, la mayoría de los seguidores y fans de la mítica banda británica no acababan de creerse la cancelación de este concierto ya que muchos de ellos habían adquirido entradas para las actuaciones que The Rolling Stones iba a ofrecer en Barcelona y Madrid, que también fueron cancelados.
Algunos fans ponían en duda la veracidad del motivo esgrimido por la productora del concierto para cancelar la actuación de la banda, la afonía del cantante y líder, Mick Jagger. Es más, en las inmediaciones del estadio José Zorrilla se podía oír a los seguidores decir: "Mucho sexo, mucha droga y poco rock and roll".
"Superstars que están entre algodones y una afonía, eso no se lo come ni Dios, mucho sexo y drogas pero rock and roll poquito poquito", señaló otro joven procedente de Valencia, quien ya intentó acudir al de Barcelona y quien lleva en la ciudad del Pisuerga cinco días. "Ahora nos encontramos con esto, unas horas antes, ya está y a casa", señaló este joven, quien reiteró que no cree la versión de la laringitis --"una afonía se coge de ser un viva la pepa"-- debido a los cuidados y a la profesionalidad que se espera de personas como ellos.
Oscar llegó a Valladolid procedente de Madrid aunque al menos, se congratulaba, no ha sufrido los efectos de dos cancelaciones dado que compraron las entradas para el concierto en el José Zorrilla y no para el de Madrid, al contrario que Emilio, un amigo suyo, quien no sólo compró entradas para el de Madrid sino que además las vendió. "Todos los que se cabrearon conmigo cuando se canceló el de Madrid ahora se van a reír de mí", apuntó antes de aconsejar a la banda que los que tiene que hacer es no volver a España. "Total, para qué", subrayó.
Según relató Oscar, quien llegó a media mañana a Valladolid con el objetivo de partir de nuevo para casa al finalizar el concierto, fue un señor británico que se desplazaba en moto en la zona vallada del estadio quien les comunicó que el concierto se había cancelado. "Nos hemos quedado para saber si era verdad o no y al final nos lo han confirmado a través del móvil", manifestó Oscar, quien añadió que vuelve a Madrid con "bastante mala leche". "Mick, si me escuchas, estoy con un mosqueo de tres pares de huevos", afirmó Oscar, quien tildó de "impresentables" tanto a los miembros de la banda como a la propia organización.
También Pablo, procedente de Madrid, es afectado por partida doble por las cancelaciones de los británicos ya que su primer intento fue la capital de España y el segundo les llevó a Valladolid. "Me he quedado con las ganas y triste", explicó este joven, quien al contrario que el enfado que invadía a muchas de las personas allí presentes, su pena radicaba en el hecho de no haber visto nunca a la banda en directo.
Mariano, quien llegó también desde Madrid, es ya un veterano en lo que a los Stones se refiere porque el de Valladolid iba a ser el número 13 en su vida. "El 13 al final es verdad que da mala suerte", apuntó Mariano, quien añadió que la noticia llegó a sus oídos de la mano de las personas encargadas del merchandising, que aseguraron que recogían porque el concierto se suspendía. "Veníamos con una ilusión enorme y tenemos que volver a casa con las orejas gachas", afirmó Mariano, quien dio un voto de confianza a la laringitis de Jagger --"te lo tienes que creer"-- porque, considera, nadie cancela un concierto de las dimensiones del de Valladolid "por una tontería".
Por su parte el vallisoletano Luis Miguel de la Fuente, a quien ya le suspendieron el concierto de Madrid, no podía creerse lo sucedido. "Habrá que resignarse, como hablan de un aplazamiento...", recalcó este joven, quien consideró que hay que "creerse" la afonía del líder de 'Sus Satánicas Majestades'.
Pero una de las personas más conmocionadas por la cancelación del concierto era Ricardo, un vallisoletano que compró hace poco su entrada, cuando decidió cambiar la del césped por una de las de 300 euros que permitían ver el concierto desde el escenario. Entre sollozos, relató cómo a las 14.00 horas, cuando fue a recoger la entrada, le confirmaron la cancelación. "Me da igual el dinero porque me lo van a devolver pero me he pateado toda España para ver a los Rolling, he estado en Portugal, venían a mi ciudad y... y no hay sueño", lamentó.
En este sentido, los seguidores y fans no se creen que tras décadas de experiencia de los integrantes de la banda británica se pueda llegar a cancelar un concierto apenas seis horas antes de que comience.
La situación se ha dado la vuelta y cuando los operarios tenían que dar los últimos remates al montaje del escenario principal y secundario, los trabajos se centran ahora en el desmontaje de la infraestructura que iba a servir de plataforma para la actuación de "sus satánicas majestades", actuación esperada por cerca de 40.000 personas llegadas de diferentes puntos del país y del extranjero.
Del extranjero precisamente, en concreto de Argentina, procedía uno de los grupos más numerosos de los que se concentraba en las proximidades del estadio José Zorrilla. Entre música de guitarras y canciones, cerca de una decena de argentinos que cruzó el charco para ver a los Rolling en Valladolid, se lamentaba de lo sucedido.
"Sigo siendo fanático de los Rolling, no lo puedo perder, es lo mismo que Maradona venga y me escupa, y puede preguntar si sigo siendo fanático de Maradona... los Rolling son como Maradona", afirmó Guillermo, quien recalcó que las entradas para el concierto de Valladolid les han salido "muy caras".
"Nos fallaron loco", señaló este joven, que lleva tres días con sus amigos en Valladolid y quien se mostró "decepcionado" porque quería ver a los británicos, pero contento "por estar con toda la banda, con toda esta gente que es buenísima".
