García Montero recuerda la "España gris" de sus amigos Miguel Ríos y Sabina en 'Alguien dice tu nombre'

García Montero
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 3 abril 2014 14:04


MADRID, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -

El escritor Luis García Montero regresa a la novela para retratar en 'Alguien dice tu nombre' (Alfaguara) la "España gris" de los años 60 que vivieron amigos suyos como los cantantes Miguel Ríos o Joaquín Sabina.

'Alguien dice tu nombre' muestra a principios de los años 60 los tres meses de verano en Granada de León Egea, un joven estudiante de Filosofía y Letras que conocerá en este tiempo los primeros amores en el transcurso del paso a la vida adulta.

Según ha explicado Montero en una entrevista con Europa Press, esta obra cuenta con momentos autobiográficos pero no siempre desde la perspectiva del autor. "Es la imaginación que yo me hago de la generación anterior, de mis amigos mayores", ha resaltado.

Tanto Miguel Ríos --con la misma edad que el protagonista-- como Joaquín Sabina estuvieron estudiando en Granada. El poeta granadino les ha dejado el manuscrito para que le indicaran si había "algún desarreglo temporal" o si reconocían la ciudad que describía.

"He contado con su opinión y con su apoyo", ha señalado Montero, quien también aparece como personaje gritando su nombre en una playa de Granada. "Es una historia de pasión literaria que intenta ver cómo debajo de la grisura siempre hay momentos brillantes", ha aseverado.

"DESPRECIO" A LOS MAESTROS

El protagonista, León Eegea, admira a su profesor de literatura, una situación que no es baladí para el escritor, dado "el desprecio actual hacia los maestros" que entiende se da en España tanto en los colegios como en las universidades.

"El maestro es el que une el oficio con la vida, pero ahora hay un desprecio hacia ellos que me resulta peligroso", ha criticado. En esta misma línea, Montero entiende que la "indiferencia" que se vive en España respecto a la crisis actual es una consecuencia de lagunas en el sistema educativo.

"Ahora hay gente que prefiere cerrar los ojos y no ver la injusticia. Me recuerdan a los consejos de mi abuela: 'no te metas en eso'. Por eso es importante recordar que el mejor antídoto para la indiferencia es la admiración y evitar la invisibilidad de lo bueno", ha señalado.

"OJOS DE POETA"

Montero incluso ve paralelismos con la época de los años 60 de los últimos años del franquismo y la actual, principalmente por "los tiempos de transformación". "Eran años en los que se veía la llegada de turistas en la playa, en la radio dejaba de sonar copla para dejar paso a 'The Beatles'...había una transformación social y ahora toca cambio de otra época", ha apuntado.

Montero, habituado a la escritura de poesía, ha reconocido que se decidió por la narrativa en esta ocasión "por el miedo a repetirse". En cualquier caso, ha admitido haber tenido "muy en cuenta el error de querer escribir novela con ojos de poeta". "El poeta busca la condensación de su mundo en muy poco tiempo, algo que no tiene nada que ver con la narrativa", ha resaltado.