Insta a crear una Editora Nacional que "permita el necesario trasvase entre las literaturas de distintas lenguas dentro del Estado"
MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
El exeditor de Caballo de Troya Constantino Bértolo, jubilado recientemente, no augura a los nuevos autores un futuro mejor a la hora de publicar, en comparación con generaciones anteriores, a pesar de estar inmersos en una crisis que "puede llamar más la atención" de las editoriales.
"Los nuevos autores seguirán teniendo tantas dificultades como han tenido en el pasado, aunque ciertamente la eclosión en los 90 de autores como José Ángel Mañas o Ray Loriga abrieron las expectativas. No obstante, en un contexto de cierta agitación cultural provocada por la crisis, en los próximos meses puede haber más atención hacia autores nuevos", ha señalado en una entrevista con Europa Press.
En cualquier caso, ha reiterado que la clave estará en las decisiones de las propias editoriales, en tanto que "mantengan el pulso" aún sin amortizar la primera inversión y decidan editar segundas y terceras novelas de los autores que empiezan.
'Descubridor' de nuevos talentos literarios como Ray Loriga, Mercedes Cebrián o Elvira Navarro, Bértolo da por finalizados sus vínculos con el mundo editorial, aunque continuará trabajando en la publicación de su nuevo libro de ensayos literarios 'Narrativa que algo queda'.
El exeditor, quien contempla la jubilación como "una especie de limbo entre la muerte laboral y la muerte física", ha asegurado no obstante que ahora vendrá "un periodo de calma y de autoobservación", con perspectivas de volver a la crítica literaria "sin tener claro cómo ni dónde".
Repasando los años que ha estado al frente de Caballo de Troya, Bértolo ha lamentado que durante este periodo el mundo editorial haya "intensificado" su labor de márketing, en detrimento de hacer públicos determinados textos. "Vivimos en una sociedad de consumo y por tanto es importante crear necesidades, publicitar en definitiva aquello que propones", ha aseverado.
Sin embargo, también reparte culpabilidad entre otros dos sectores ligados al libro: el gremio de editores y los periodistas. En cuanto a los primeros, ha resaltado la decisión de "priorizar" la venta de novedades "con mayor atractivo comercial" durante la crisis".
"Ahora con la crisis está estrategia puede estarse volviendo en contra del propio negocio. En estos momentos parece claro que las librerías están llamadas a reconvertirse en 'espacios culturales' y a buscar señas de identidad acentuando su especialidad", ha explicado.
UNA EDITORA NACIONAL
Respecto a los periodistas, ha criticado el acudir a "una cultura de lo noticiable, ya sea un premio literario, un aniversario o un escándalo", dejando de lado el tema puramente literario. "Además, no estaría mal que dejasen de mirar tanto hacia el mercado anglosajón y se atrevieran a ser un poco menos provincianos", ha aseverado.
Por último, en cuanto a la política cultura, Bértolo ha descartado las subvenciones directas, instando al Gobierno a poner en marcha una "educación crítica" con iniciativas que facilitaran la creación de espacios de lectura y debate. Asimismo, ha pedido la creación de una Editora Nacional que "permitiese el necesario trasvase entre las literaturas de distintas lenguas dentro del Estado".
