El Teatro Real homenajea al cine mudo con 'La flauta mágica' de Mozart

Escena de 'La flauta mágica' en el Teatro Real
Escena de 'La flauta mágica' en el Teatro Real - JAVIER DEL REAL
Actualizado: jueves, 16 enero 2020 11:37

   MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -

   El Teatro Real homenajeará al cine mudo con la reposición a partir del próximo 19 de enero de 'La flauta mágica', de Wolfgang Amadeus Mozart, en un montaje que trata de "acercar lo más posible al público" una obra que fue escrita precisamente con 'alma popular'.

   "Hay una parte que facilita mucho la obra para el público que no habla alemán. 'La flauta mágica' era una 'singspiel', como una zarzuela con partes habladas y cantadas, y se han suprimido esas partes por un mudo con subtítulos", ha explicado durante la rueda de prensa el director de escena, Tobias Ribitzki.

   El resultado de esta adaptación, que cuenta con dirección musical de Ivor Bolton, es el de una construcción de "personajes arquetípicos" que terminan siendo reconocibles en el escenario. Por ejemplo, el terrible Monostatos, equivalente a la figura de Nosferatu; Papageno como el arlequín o trasunto de Buster Keaton; e incluso Papagena como "una Sally Bowles del cabaret".

   El Teatro Real acogerá nuevamente esta obra --cuyas funciones están patrocinadas por la Fundación BBVA-- cuatro años después de su paso por el coliseo madrileño. Joan Martín-Royo, quien ya estuvo por entonces con el mismo papel de Papageno, ha defendido ese carácter 'universal' con el que el autor de 'Las bodas de Fígaro' decidió dar un giro a su producción.

   "Lo que nos cuentan la música y el texto llegará a muchas personas porque toca temas universales. Lo importante era abrir para todos esta pieza que fue pensada por Mozart como algo divertido, pero también mezclado con momentos emotivos y reflexivos", ha añadido Martín-Royo, quien ha incidido en ese tono 'bromista'.

   "Por ejemplo, se habla de la masonería y eso tenía un trasfondo muy serio. Pero Mozart y Schikaneder (autor del libreto) eran muy bromistas y en el escenario se improvisaba incluso comentando la actualidad política. Había un espíritu de bromear", ha añadido.

SIN DECORADOS Y CON PROYECCIONES

   Ribitzki, que ha preparado una escenografía 'virtual' reducida a una pantalla en el escenario, ha hablado de las dificultades de esta adaptación. La producción carece de decorados y en ella los cantantes interactúan con las proyecciones de una película de animación y en las partes habladas de la ópera los diálogos aparecen proyectados en cartelas y acompañados al pianoforte por Ashok Gupta.

   "Era difícil en cuanto a una puesta en escena porque con 'La flauta mágica' flotan en el aire muchas ideas. Sin embargo, algo que evoca al cine ayuda a resolver el problema del carácter mágico con elementos como el agua, el fuego...La música, el amor y las imágenes son las claves de esta ópera", ha destacado.

   En esta ocasión se ofrecerán 13 funciones, entre el 19 de enero y el 24 de febrero, nuevamente con el director musical de Teatro Real, Ivor Bolton, al frente de un doble reparto, del Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real y de los Pequeños cantores de la JORCAM.

   'La flauta mágica' es uno de los títulos operísticos más populares de Mozart, que se presentará por cuarta vez en el reinaugurado Teatro Real después de haberlo hecho en enero de 2001 (Frans Brüggen / Marco Arturo Marelli), julio de 2005 (Marc Minkowski / La Fura dels Baus) y enero de 2016, con esta misma producción.

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