VITORIA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del iurbentia Bilbao Basket, Txus Vidorreta, se presentó exultante en la rueda de prensa tras la importante y sorprendente victoria lograda esta noche ante el AXA FC Barcelona, vigente campeón de la Copa del Rey, rompiendo, además, la maldición de los debutantes en los últimos años.
"Creo que hemos hecho un gran partido. Jugamos sin miedo al Barcelona con mucho descaro y acierto. Tuvimos algo de desacierto y les dimos opciones de entrar en el partido. Hemos demostrado que ha sido un cara a cara con el Barca, somos justos vencedores y hemos dominado los 40 minutos", explicó el preparador del cuadro bilbaíno.
Vidorreta, además, cree que este triunfo les sirve para confirmar la buena temporada que están realizando. "No entrábamos en la Copa de carambola y lo hemos demostrado. No es fácil ganar al Barcelona y menos en la Copa del Rey donde el Barcelona compite al cien por cien. Estamos muy orgullosos de romper la tónica donde los debutantes no tienen la opción de competir más allá del primer partido", subrayó.
Sin embargo, el vestuario del iurbentia Bilbao no está feliz tras la lesión de Luke Recker, ya que es "el único pero del partido". "Recker no está teniendo mucha suerte. Nos hace estar disgustados porque le perdemos no sólo para semifinal, sino para varios partidos. Es un jugador importante, sacaremos el espíritu de donde sea para superar la semifinal", advirtió.
"Nosotros queremos jugar todos los partidos y hacerlo ante el Tau, el rey de copas en los últimos años y además en Vitoria, será muy bonito. Será un buen partido si nos recuperamos física y mentalmente de la ausencia de Recker", señaló Vidorreta.
Y es que el preparador técnico es ambicioso y quiere más. "El haber estado en la Copa era algo increíble, un sueño a principio de temporada y ahora queda reafirmar que tenemos un gran apoyo detrás. Somos un bebé que empieza a dar pasos, ya no gateamos. Este partido es importante, pero nuestro crecimiento lo marca la trayectoria deportiva", concluyó.
Por su parte, el pívot francés Frederic Weiss confesó que esta victoria le sabía a dulce, "a Nutella". "Hemos luchado y defendido muy bien, mientras que al Barcelona le costaba anotar. Hemos ido al rebote y realizado un gran partido. Merecimos la victoria desde el primer minuto", concluyó.
