MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Real Madrid, Joan Plaza, mostró su descontento con el juego del equipo en el partido ante el Milán en Euroliga a pesar de la agónica victoria conseguida, y achacó el mal inicio de temporada de su equipo a la "carga de tensión" que debe soportar el equipo tras los primeros tropiezos.
"Como dice Manel Comas, los entrenadores llevamos una mochila de presión a la espalda. Todos los nervios que hemos pasado en las últimas semanas no han impedido jugar con traquilidad. Queremos acabar bien la semana contra un rival tan dificíl como el Bilbao, pero para eso tendremos que liberarnos de esas piedras que llevamos a la espalda", explicó el técnico madridista.
Para Plaza, la mayor repercusión de ese exceso de tensión en sus jugadores se da en el ataque, donde sus jugadores no terminan de encontrar la fluidez necesaria. Por contra, en defensa, son "uno de los mejores de la Euroliga". "Como el año pasado, hemos empezado con más defensa que ataque. Estamos jodidos y debemos recuperar ese ataque conforme avancen los partidos", analizó.
"No hemos sido capaces de mantener el nivel del principio y hemos acabado jugando un partido demasiado tosco. Sabemos que jugaremos más bonito, pero ahora estamos acoplando a la gente. El deseo y la voluntad de mis jugadores está siendo muy alta, porque nos vemos capaces de jugar mejor", valoró el entrenador del Real Madrid, que desveló que sus jugadores estaban "cabreados en el vestuario a pesar de la victoria".
Así, el entrenador catalán volvió a subrayar la necesidad de tener "paciencia" para que el buen juego de ataque regrese a las filas madridistas. "En defensa hemos vuelto a tener un buen nivel, pero ofensivamente nos hemos atascado. No tenemos aún un juego plástico y bonito y sabemos que es difícil de ver, pero partidos tan duros como éste nos permitirán obtener réditos cuando se jueguen las cosas importantes", explicó.
A este cúmulo de circunstancias se unió la lesión de Pepe Sánchez, que se dañó en una entrada a canasta. Su posible baja se une a la de Raúl López, que a pesar de sus deseos de jugar permaneció en el banquillo por decisión técnica. "Los médicos me han recomendado calma con él y no seré yo el que juegue con la lesión de nadie", justificó Plaza, que descartó cualquier posibilidad de fichaje para el puesto de base salvo que se confirme una lesión de larga duración para el argentino.
