MADRID, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
El seleccionador español de baloncesto 'Pepu' Hernández señaló que el triunfo (70-47) contundente sobre Grecia en la final del Mundial de Japón que los proclamó campeones del mundo, fue una "demostración de confianza y seguridad".
"Los jugadores han hecho un trabajo extraordinario durante el partido de hoy y durante todo el torneo. Ha sido una demostración de confianza y seguridad", afirmó el técnico tras el encuentro.
Hernández, cuyo padre falleció la noche antes de la gran final, no quiso comunicar la noticia a sus jugadores ni antes ni después del encuentro. "No quiero hablar de ello, nada podía afectar al grupo, lo hemos intentado y no quería ver caras distintas. Me ha costado. Me han ayudado mucho desde casa mi madre y mi hermano, mi gran recuerdo es para ellos", indicó emocionado.
El partido ante Grecia resultó mucho más asequible que las semifinales ante Argentina, en las que se sufrió para ganar por sólo un punto de diferencia. "En la final pudimos recuperar nuestro juego que en el partido anterior habíamos tenido muchas dificultades para desplegar", agregó el preparador.
"Quiero hacer extensiva la felicitación al cuerpo técnico que ha trabajado en la coordinación para ayudar a un gran grupo de jugadores como el que hemos tenido", añadió.
Al ser preguntado por las claves de su éxito, el entrenador cedió el mérito a sus pupilos. "Los jugadores te escuchan y luego juegan sólos. Ellos creían en sí mismos y en el estilo del equipo. Más allá de la estrategia del entrenador está la ambición de los jugadores y las solidaridad entre ellos", concluyó 'Pepu' Hernández.
