Una final para la historia en la Copa de Laprovittola

Copa del Rey de Madrid
ACB
Publicado: domingo, 17 febrero 2019 23:57

MADRID, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -

La 83 edición de la Copa del Rey de baloncesto terminó este domingo con el título del Bara Lassa, un torneo que no solo será recordado por la prórroga en la que cayó el Real Madrid, sino que pasará a la historia como la Copa de Nicolás Laprovittola y los 50 de valoración, o por el técnico de Iberostar Tenerife, Txus Vidorreta, rodillas en el suelo del parqué madrileño.

Una década de finales Madrid-Bara que dejó en reparto igualitario de títulos la canasta ganadora de Tomic en los últimos segundos. El Instant Replay validó el 93-94 que había impedido Randolph y destapó la indignación del Madrid. Pablo Laso entró en rueda de prensa con Juan Carlos Sánchez: "No es tapón, es rebote". Otra final con polémica, como la del año pasado en Las Palmas con la falta de Claver que no se pitó sobre Taylor cuando los blancos buscaban la prórroga.

La de Madrid 2019 tuvo más acciones propensas a herir sensibilidades, como una falta flagrante de Randolph sobre Singleton poco antes. En verdad de lo que más tuvo fue baloncesto y drama. Una final que ambos vieron ganada: el Madrid con un golpe tras el descanso y el Bara con una reacción de campeón. Pesic lo volvió a hacer, como cuando llegó a Las Palmas con un título bajo el brazo.

A pesar de que Llull forzó el tiempo extra, el cuadro azulgrana se esmeró en confirmar que tiene mimbres para volver a luchar contra el Madrid o lo que es lo mismo, desafiar a cualquiera en Europa por volver a la senda de los títulos. El MVP de Madrid fue Thomas Heurtel, único en ganarlo en dos ediciones seguidas, pero la de Laprovittola fue la actuación más sonada, cuando engulló al Baskonia con la mejor actuación individual en la historia de la Copa

El base argentino rompió un récord de 19 años ante los vascos en cuartos de final, de nuevo decepción copera para los de Vitoria. El show fue de 50 de valoración (36 puntos, 7 asistencias, 4 recuperaciones, 4 rebotes, 9 faltas recibidas y 2 tapones), superando los 47 créditos del pívot estadounidense Tanoka Beard, en la Copa 2000 con el Pamesa Valencia.

"Armé la maleta para quedarme hasta el domingo", dijo Nico en la previa a su estreno. Venía enchufado y lo confirmó ante los vascos, para devolver a la 'Penya' a semifinales de Copa cuatro años después. La de los de Badalona es otra bonita historia que deja la cita, un histórico del baloncesto español que, después de sobrevivir en lo deportivo y económico, volvía al escaparate nacional.

En el Canarias parecían en cambio acostumbrarse al éxito. El regreso de Txus Vidorreta a La Laguna, artífice de la Champions FIBA en 2017, dio la segunda 'semis' seguida de Copa a los tinerfeños, dispuestos a superarse. El año pasado fue el Madrid y este, el Bara quien rompió sus sueños. Iberostar entró al último cuarto 20 abajo, pero apretó con todo y rozó una remontada épica.

OTRO CLÁSICO A LA VISTA

Un desenlace que pudo tener en la falta de Brussino señalada sobre Ribas, cuando lanzaban la contra para ponerse a dos y menos de un minuto por delante. Vidorreta hincó las rodillas en el suelo en su banda, en una imagen para el recuerdo, rogando por una jugada de respiro para el Bara. "Se han equivocado (los árbitros) y eso nos ha perjudicado", protestó amargamente.

"Jugar una final en España a día de hoy es misión imposible", añadió, en una queja al formato de la Copa, echando de menos un sorteo puro, sin cabezas de serie. Otra vez el Clásico se comió las sorpresas y el adjetivo 'abierto'. El Bara jugó algo más con fuego. En cuartos el Valencia Basket estuvo en el partido hasta los últimos tres minutos, donde un parcial de 13-0 despidió a los 'taronja'.

Después llegó la emboscada del Canarias, salvada 'in extremis' y con otra de las polémicas del torneo. El Madrid había sido más contundente para llegar a su sexta final seguida. El derbi que apuntaba a plato fuerte de la primera ronda ante Movistar Estudiantes fue una paliza sin miramientos (94-63). El cuadro colegial volvía a la Copa seis años después y estuvo lejos de emular la victoria en liga sobre su vecino que traía como aval.

El Madrid sacó también el rodillo sobre el Juventut, o más bien el plan anti-Laprovittola. El hombre récord del Palacio no pudo ayudar a su equipo y tampoco hubo sitio para el sueño de los mortales y humildes por el lado del campeón de Europa. Llegaba lanzado el Madrid a su reconquista, pero topó con un Bara que madura.