CASTRES (FRANCIA), 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ciclista belga Tom Boonen (Quick Step) se adjudicó, al sprint, la duodécima etapa del Tour de Francia una vez que el pelotón consiguiera neutralizar, a falta de 900 metros para la meta, la larga escapada del español Amets Txurruka (Euskatel Euskadi) y el francés Pierrick Fédrigo (Bouygues Télécom), en una etapa que se disputó sobre un recorrido de 178,5 kilómetros entre las localidades de Montpellier y Castres.
El capítulo número 12 de la ronda gala se caracterizó por la escapada de Txurruka y Fédrigo, que se desligaron del pelotón cuando aún restaba más de la mitad del recorrido, incluido el Montée de la Jeante, puerto de segunda categoría a 50 kilómetros de meta, punto más alto del recorrido con casi 1.000 metros de altura.
La Française Des Jeux y el Lampre-Fondital fueron los principales implicados en la caza del tándem hispano-francés. El resto de equipos que ya se han adjudicado una victoria en la ronda gala cedieron protagonismo y aguardaron al fondo del pelotón. Sin embargo, al final, el belga impuso su veteranía sobre el alemán Erik Zabel (Milram) para apuntarse una nueva victoria en su palmarés.
Los dos escapados alcanzaron los 12 minutos de ventaja sobre el pelotón y mantuvieron un ritmo constante, aunque reducido por el fuerte desnivel de la Jeante. Aún así, y a pesar de la constancia de los dos líderes de carrera en ese momento, los hombres del Liquigas, de Filippo Pozzato, aumentaron su cadencia para imprimir más velocidad a la etapa.
El recorrido de hoy, de media montaña, presentó un día sin complicaciones, aunque a falta de 50 kilómetros para meta, el pelotón se envalentonó, gracias también a los miembros del Euskaltel, que debieron frenar el ritmo para beneficiar a uno de los suyos, Txurruka, que a medida que llegó la línea de meta fue adquiriendo más opciones de victoria, que se vinieron abajo en el último suspiro.
Por su parte, y un día más, el danés Michael Rasmussen, protagonista por la exclusión de su selección al no presentarse a dos controles de dopaje, sumó su quinto día vistiendo el maillot de amarillo. Hoy, tras confirmase su salida por la organización, apenas tuvo problemas para controlar las tentativas del pelotón, que contó con los pocos velocistas que aún quedan en el Tour, en su parte delantera.
Mañana, sin duda alguna, será un día clave para las opciones de los 'gallos' de este Tour con la llegada de la contrarreloj de 54 kilómetros en la localidad de Albi. Los especialistas de la montaña tendrán que perder lo mínimo posible ante la amenaza de un Andreas Kloden (Astana), que podrá esclarecer su futuro contra el tiempo.
