"Flandes es mi gran objetivo, me encanta y el año pasado ya logré estar en la fuga"
SALAMANCA, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ciclista Fran Ventoso (Saunier Duval), vencedor de la segunda etapa de la Vuelta a Castilla-León, se mostró convencido del triunfo antes de tomar la salida y se declaró satisfecho por haber logrado su primera victoria de la temporada, después de los segundos puestos en la París-Niza, 'Challenge' de Mallorca y Vuelta a Andalucía.
"La verdad es que medio triunfo se lo debo a mi compañero, el 'Quillo' Benítez. Ha estado sensacional. Le he dicho que aguantara a mi rueda todo lo posible para tratar de hacerme la llegada y, a falta de 400 metros me ha dicho: '¡Ahora!'. Ha pasado a los Benfica, y me ha dejado en cabeza a 200 metros del final", relató.
El cántabro confesó que esta mañana ya estaba seguro de que lograría el triunfo, pues en la contrarreloj inicial de la ronda castellana tuvo buenas sensaciones a pesar de que no era un terreno propicio para él.
"Ha salido convencido de la victoria. Conocía a la perfección la llegada. La había hecho en escuelas, en tres Vueltas a Salamanca, en los Campeonatos de España ... En la París-Niza ya me encontré muy bien, pero ayer, en un recorrido que no me iba mucho, vi que iba súper", manifestó.
Ventoso aseguró que esta victoria le va a dar "mucha tranquilidad" porque, según él, "llevaba un gran año, pero no había podido rematar". "Después de levantar una vez los brazos, aunque yo soy el primero que me exijo más, ves las cosas de otro modo", manifestó.
A su juicio, la tercera etapa de mañana y la del último día pueden ser buenas etapas para él. "Voy con la idea de tratar de repetir victoria. Después ya tocará pensar en las clásicas, sobre todo en Flandes, que es mi gran objetivo. Es una carrera que me encanta y el año pasado ya logré estar en la fuga", recordó.
Ventoso también disputará la Gante-Wevelgem y París-Roubaix, pero piensa que, con esta victoria, ya se ha desquitado de la "cara de tonto" que se le quedó en la Milán-San Remo, ganada, por segunda vez, por su paisano Oscar Freire. "Llegaba muy bien y dos averías en la parte final me hicieron perder todas las opciones", apuntó.
