Ciclismo/Vuelta.- (Ampl.) Vinokourov impone su ley y sentencia a Valverde en La Pandera

Actualizado: jueves, 14 septiembre 2006 20:33

El jersey oro cedió el triunfo a su compatriota Kashechkin y amplió su ventaja hasta los 53 segundos con el murciano

JAEN, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -

El kazajo Alexandre Vinokourov impuso su ley, la del más fuerte, y sentenció la Vuelta a España en el Alto de la Sierra de La Pandera, meta de la decimoctava etapa de la ronda, con salida en Granada y sobre 153,1 kilómetros, en la que Alejandro Valverde cedió más terreno en la clasificación general.

El triunfo fue para el campeón kazajo, Andrei Kashechkin, en otro gesto bondadoso de Vinokourov, segundo, quien asestó un zarpazo a Valverde y a la carrera a 5 kilómetros para el final y que entró bajo la llegada con algo más de medio minuto de renta respecto al subcampeón del mundo.

El ex pupilo de Manolo Saiz aventajó en 32 segundos al jefe de filas del equipo balear, cuarto, y añadió, además, 12 segundos de bonificación en la cumbre jienense, lo que amplió su distancia hasta los 53 segundos en la pugna por el oro en el circuito triunfal por las rutas madrileñas.

Y ello pese a que Eusebio Unzue, quien anunció batalla en la última etapa de montaña -la de mañana no tiene un perfil de envergadura-, cumpliera con su amenaza de plantear un camino de espinas al pupilo de Díaz Zabala.

La consigna era disputar el triunfo de etapa para atrapar los 20 segundos de saldo que, además de un puñado de felicitaciones y rosas, se embolsa el triunfador. Un grupo de 7 escapados, entre ellos Pedro Horrillo, el amigo íntimo del triple campeón mundial Oscar Freire, el ciclista lúcido y asediado por las lesiones, se cruzó, sin embargo, por su camino.

En cambio, el grupo balear no se alteró. El virtual ganador del Tour, Oscar Pereiro, el incombustible 'Chente' García Acosta, Joan Horrach o Xabier Zandio se intercambiaron en la función de desgastar las piernas de los rivales, especialmente de un Vinokourov cómodo a rueda de 'Balaverde'.

Así atraparon al danés Nicki Sorensen, del CSC, el último superviviente del septeto en las faldas del Alto de Villares, puntuable de segunda y donde el jersey de la montaña, Egoi Martínez, e Iban Mayo se concedieron una tregua de protagonismo antes del furibundo ataque del líder de la general.

Vinokourov quiso resolver la incógnita del ganador antes de la crono del sábado de Rivas Vaciamadrid y demostrar que su músculo era aún mayor que el del resto, incluido el agonizante Valverde, clavado en las rampas del 17 y 18 por ciento, incapaz de seguir la rueda amiga de su compañero Joaquín Rodríguez.

No obstante, el derrumbe del murciano no fue total. De hecho, rápido cedió una treintena de segundos y la sangría no se abrió más hasta la meta, donde 'Vino' no quiso lograr su tercer triunfo en la presente edición. Como en la víspera con Danielson, como lo hacía Indurain y nunca lo supo Armstrong, festejó su victoria a la espalda de su amigo Kashechkin.

El Astaná completó su doblete, primero y segundo, y celebró la victoria final que ya atisba en el horizonte. Pese a su último esfuerzo, Valverde no pudo alcanzar la estela de José Angel Gómez Marchante, del Saunier Duval, tercero y que se llevó los últimos 8 segundos de bonificación.

Mañana, se disputa la decimonovena etapa, Jaén-Ciudad Real, de 205,3 kilómetros, un tobogán de sube y baja con tres puertos, dos de tercera y uno de segundo, aunque muy alejados de la meta como para que, a priori, los favoritos puedan mover pieza en su continua lucha por la general.