MONTECARLO (MÓNACO), 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ciclista español Alberto Contador (Astana), ganador de la 'Grande Boucle' en el año 2007, reconoció estar "contento" tras la finalización de la etapa prólogo del Tour, una contrarreloj de 15,5 kilómetros transcurridos en el Principado monegasco, y que, pese a que su principal objetivo "no era ganar la etapa", ha dado un "golpe moral" a sus rivales.
"Estoy muy contento con el resultado. Mi objetivo no era ganar la etapa, he salido a tope para conseguir el mejor resultado, porque sabía que Fabian Cancellara es un grandísimo especialista y viene de ganar la Vuelta a Suiza con una increíble autoridad", comentó.
El corredor madrileño recalcó que, pese a que las diferencias no fueron tantas como se esperaban, ha conseguido dar un "golpe moral" a sus rivales. "He sacado poco tiempo a los favoritos en la general, pero ha sido un golpe de moral y no estoy en absoluto decepcionado, al contrario, estoy muy contento", afirmó.
Asimismo, el ciclista de Pinto destacó la "dificultad" de la etapa prólogo. "Era una prueba muy difícil porque había gente mejor preparada que yo para este trazado, pero sabía que tenía que aprovechar la oportunidad y buscar diferencias", dijo.
En referencia al ganador del día y primer maillot amarillo de la ronda gala, Contador comentó que perdió su ventaja obtenida durante la subida al afrontar el descenso "sin ir a tope". "No he querido arriesgar en absoluto en las curvas, además, Cancellara es buenísimo", calificó.
Respecto al liderato del equipo Astana, en el que militan grandes corredores como el alemán Andreas Kloden, dos veces en el podio de la 'Grande Boucle' (2004 y 2006), el estadounidense Levi Leipheimer y el heptacampeón en París Lance Armstrong, cuyo retorno a la competición ha generado un debate en torno al liderazgo del conjunto kazajo, el madrileño fue claro.
"No quiero entrar en si soy el líder o no, lo importante es que he conseguido un golpe de moral muy bueno y esto es síntoma de que estoy en muy buena forma. Estos segundos me vendrán bien porque será un Tour muy apretado", indicó.
Además, el único campeón en activo de las tres 'Grandes' remarcó que debe "seguir trabajando" dado que el Tour no ha hecho más que comenzar. "El Tour acaba de empezar y queda mucho. Lo más importante para mí es que tengo buenas sensaciones, porque si el cuerpo responde lo demás ya vendrá: debo seguir trabajando y ojalá tenga suerte y pueda ganar", subrayó.
Por último, el español especificó que el maillot de la montaña, caracterizado por sus lunares rojos, "es bonito, como las sevillanas, pero me gustaría cambiar el color dentro de unas semanas por el amarillo de líder", concluyó.
