MILÁN (ITALIA), 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Alberto Contador, que con su victoria en la 91 edición del Giro de Italia se convirtió en el segundo español tras Miguel Induráin en vencer tanto en la carrera italiana como en el Tour de Francia, declaró tras la última contrarreloj de Milán que el "maillot rosa es quizás más bonito que el maillot amarillo".
"Todo el mundo quería ganar este Giro, ha sido una carrera muy dura. Empecé a pensar en ganar el Giro cuando me vestí de rosa, pero sabía que tenía que luchar hasta el final", dijo Contador.
Respecto a la decisión de la empresa organizadora del Tour de Francia de impedir la participación del Astana en la carrera francesa, el madrileño declaró que "no cree que cambien de idea". "Tomaron una decisión que no comparto, pero espero que hayan visto la carrera", explicó Contador, que señaló que el maillot rosa es quizás "mejor que un segundo Tour de Francia".
Además, Contador quiso agradecer el trabajo de todos sus compañeros durante la carrera y señaló que la unión ha sido un aspecto fundamental. "Es increíble lo que hemos progresado unos junto a otros durante estas tres semanas", explicó Contador.
El madrileño resaltó especialmente el trabajo que hizo Kloden aún estando enfermo, por lo que comentó que "ha ganado un amigo". "Es asombroso lo que han hecho por mí corredores como Levi Leipheimer y Andreas Kloden, que son ganadores potenciales de Grandes Vueltas y han trabajado duro para mi victoria como lo han hecho también los demás compañeros", dijo.
Con la victoria en la ronda rosa Contador entra en la historia del deporte español al unirse a Miguel Induráin como ganador del Tour de Francia y del Giro de Italia. "Nunca vi a Induráin sobre la bicicleta, todavía era un niño cuando él competía y yo jugaba al fútbol y hacía ateltismo, pero estoy muy orgulloso en seguir sus pasos", dijo el ciclista del Astana.
"AHORA ESPERO TERMINAR MIS VACACIONES"
Respecto al desarrollo de la carrera, Contador explicó que cada etapa de la última semana del Giro "fue importante para la victoria final" y que el día más duro lo pasó en Alpe di Pampeago. "No me sentí bien, pasé frío en el descenso previo y me sentí muy mal en la subida final", comentó.
El ganador del Tour 2007 comentó que la etapa del viernes pasado, en la que cedió tiempo con Riccó en el Monte Pora, fue uno de sus peores días de la prueba. "La etapa fue un momento delicado de la carrera porque pude perder el Giro, pero usé la cabeza para mantener el maillot rosa tras los ataques de Di Luca y Riccó", explicó.
Contador se refirió a Riccó como su máximo rival en los últimos compases de la carrera. "En la etapa del sábado sabía que tenía que estar con Riccó. Luché en la ascensión del Mortirolo pero me sentí mejor que el viernes", finalizó el español que ahora espera terminar las vacaciones que interrumpió por estar en la salida de Palermo.
