MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -
El ciclista colombiano Nairo Quintana (Movistar) ha mostrado este lunes, durante la tercera jornada de descanso, su convencimiento de poder luchar por el podio del Giro de Italia, en el que ahora marcha quinto de la general a 2:40 de su compatriota Rigoberto Urán (Omega Pharma-Quick-Step) y a 50 segundos del podio, a falta de cuatro duras jornadas de montaña desde este martes y hasta el próximo sábado.
"Estos últimos días he recuperado tiempo y físicamente me encuentro mejor, y mañana la idea es recortar el mayor tiempo posible. Si Urán sólo pierde veinte segundos cada día está claro que no hay espacio para que pierda toda su ventaja, pero estamos viendo que aquí cada día hay uno que se deja más tiempo: vimos a Evans, a Pozzovivo... cualquier día puede caer él o yo mismo", señaló en declaraciones a su equipo.
Tras superar una gripe y una infección de la garganta, Quintana se encuentra dispuesto a luchar por subirse al cajón en la 'corsa rosa'. "Veo que las piernas cada día responden mejor y espero que pueda luchar, al menos, por el podio. A pesar de todos los problemas que he tenido, estoy donde estoy. Seguro que de no haber tenido estos problemas, en la crono de Barolo hubiera perdido mucho menos tiempo del que cedí con Rigo, que aún así hizo una crono espectacular", declaró.
Este martes, el pelotón afrontará un recorrido de altísima montaña con 139 kilómetros y las ascensiones al Gavia (1ª), Stelvio (Cima Coppi) y Val Martello (1ª). "Mañana, para mí, lo mejor es que la etapa se hiciera entera. Para bien o para mal, las diferencias no van a ser las mismas si se hace sólo Val Martello. Pero está claro que tampoco puedo hacer nada para que se haga o no. Si está en malas condiciones, lo primero es la seguridad de todos. Con todos los puertos las cosas son diferentes porque la gente llega más castigada, mientras que así todos se ven con más opciones y más después de haber recuperado fuerzas con el día de descanso", indicó.
"De lo que queda, la cronoescalada va a marcar muchas diferencias. En condiciones normales me favorece más a mí que a Urán porque soy más escalador, pero hay que ver cómo evoluciono de mis problemas. Es una incógnita saber cómo me voy a encontrar cada día. En teoría tendría que hacerlo muy bien, pero aquí de momento él está al 100% y yo todavía no", continuó.
Sobre el líder Urán, cree que es "el que mejor lo tiene" para ganar, porque "aunque cede algo cada día, está perdiendo muy poco tiempo". "A Pozzovivo aún le doy como un gran favorito, por su fortaleza y la de su equipo. Ayer tuvo un mal día y es una incógnita cómo reaccionará, pero sigo contando con él. Evans ha cedido más tiempo y da la sensación de que va un poco a menos", afirmó, antes de calificar como "sorpresa" la carrera del italiano Fabio Aru (Astana).
Además, habló de la rivalidad con su compatriota. "Es bonita la rivalidad con un colombiano. Cada uno tenemos nuestra hinchada y somos diferentes. Si no gano yo, está claro que prefiero que gane él y para Colombia lo importante creo que es que lo haga un ciclista de allí", subrayó.
Por último, no quiso comparar sus sensaciones con las del Tour de Francia del año pasado, en el que finalizó segundo. "Había llegado en un muy buen estado al Giro: con muchas ganas, con un peso espectacular, bien de entrenamientos... pero me ha venido un problema tras otro con la caída, la gripe... Me han mermado mucho mi condición. Con los problemas que he tenido, era casi más para estar en casa que para seguir en la carrera. Pese a todo, no he pensado nunca en abandonar y siempre he luchado por intentar recuperarme para pelear por lo que vinimos, sobre todo porque tengo un equipo detrás que me impulsa a seguir adelante", finalizó.
