Infantino no descarta un Mundial de 48 equipos organizado por dos países en 2022

El presidente de la FIFA Gianni Infantino
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Actualizado: lunes, 4 junio 2018 21:00

ZÚRICH (SUIZA), 4 Jun. (Reuters/EP) -

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, ha asegurado que jugar el Mundial 2022 con 48 selecciones es improbable, aunque ha afirmado que si se ampliara la cantidad de clasificados debería estudiarse la posibilidad de una sede compartida.

Infantino dijo a periodistas de agencias de noticias que es prematuro hablar de un torneo de 48 equipos en Catar y destacó que no tenía idea de si Irán podría ser coanfitrión.

El Mundial pasará a jugarse con 48 selecciones -hasta ahora había 32- a partir de 2026, pero la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) propuso en abril que el cambio ya se implemente en 2022.

Infantino dijo que la propuesta será sometida al Congreso de la FIFA en Moscú el 10 de junio y que se necesitaría una decisión en el plazo de un año. "Por el momento, tenemos un Mundial con 32 equipos que se jugará en Catar. Conmebol hizo una solicitud interesante (...) así que tendremos que estudiarla", agregó.

Infantino aseguró que si se adelantara la ampliación "más equipos significa más estadios, más sedes, más hoteles, más transporte". "Si esto es posible solo en Catar es un interrogante y debería analizarse (...) Se necesita mucha gente para ponerse de acuerdo en seguir ese camino y creo que es prematuro", subrayó.

"No es probable que pueda cambiar, pero no creo que debamos preocuparnos por discutir las propuestas. Obviamente, Catar tendrá que estar de acuerdo", explicó el dirigente. "Tenemos un contrato con los cataríes, se les ha otorgado la Copa del Mundo con 32 equipos (...) Los contratos están ahí para ser respetados, pero no hay nada de malo en la discusión", dijo el suizo.

Además, no afirmó si Irán podría ser coanfitrión. "No tengo idea. Por supuesto, todo está abierto (...) vamos paso a paso", manifestó.

Catar, que planea usar ocho estadios para el torneo, ha estado en medio de un enfrentamiento diplomático después de que Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Baréin y Egipto cortaran lazos comerciales y los viajes hacia ese país en junio pasado, alegando que respalda a Irán y apoya al terrorismo. Catar niega las acusaciones y sostiene que el boicot es un intento de afectar su soberanía.