MADRID, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El FC Barcelona jugará el próximo 19 de abril su cuarta final de la Copa del Rey en las últimas seis temporadas, un ciclo en el que buscará su tercer título y, de paso, vengarse del Real Madrid de la única derrota en esas tres finales, la acontecida en la temporada 2010/2011.
Fue con la llegada de Pep Guardiola al banquillo azulgrana cuando empezó esta racha de finales coperas. En el primer año del de Santpedor como entrenador del Barça, el conjunto culé venció la Copa ante el Athletic Club (4-1), rompiendo así una sequía de once años sin ganarla. Un triunfo que supuso su Copa número 25, evitando así que el Athletic, que tiene 23, le empatase como 'Rey de Copas'.
La segunda final de este ciclo de cuatro se produjo en la temporada 2010/2011. En plena vorágine de 'clásicos' -jugaron cuatro en apenas dos semanas-, Barça y Madrid pelearon por la Copa del Rey en Mestalla. El partido de Valencia acabó mal para los intereses del equipo catalán, ya que un cabezazo de Cristiano Ronaldo en la prórroga le dio al Madrid su Copa del Rey número 18.
Apenas ocho meses después, el Barça se tomó cumplida revancha de su eterno rival en las semifinales de la edición del año 2011/2012, cuando se metió en la final a costa del equipo blanco. Su Copa del Rey número 26 llegaría de nuevo ante el Athletic, al que volvió a imponerse contundentemente, esta vez por 3-0. Un título con el que Pep Guardiola se despidió como entrenador del Barça.
Entre medias de las cuatro finales, el conjunto culé tuvo dos eliminaciones antes del partido decisivo. En el año 2010 el Sevilla apeó a los de Guardiola en los octavos de final, en una eliminatoria que se recordará por la soberbia actuación de Andrés Palop.
Tres años más tarde, fue el Real Madrid el que dejó al Barça -con Tito Vilanova de entrenador- fuera de la lucha por el título. Fue en semifinales y tras caer en el Camp Nou por 1-3 ante el equipo que entrenaba el portugués Jose Mourinho.
