MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
El director de Medios y CRM de Danone, Carlos Bosch, valoró de manera muy positiva la celebración de la decimoquinta edición de la Danone Nations Cup --celebrada en Sao Paulo (Brasil) desde el pasado jueves hasta el domingo-- y aseguró que el Mundial de los Alevines sigue siendo "una fábrica de sueños" para los jóvenes futbolistas, un infalible mecanismo para los niños.
"Todo ha salido muy bien en Brasil, donde el fútbol es casi como una religión. Como cada año lo mejor ha sido la ilusión de los niños, la demostración de que el fútbol es una excelente herramienta para trasmitir valores que van más allá del deporte, valores de compañerismo y de apertura a otras culturas. Eso es la Danone Nations Cup, una fábrica de sueños", dijo Bosch en una entrevista con Europa Press.
"Los chicos tienen clarísimo que es un juego, es normal que estén tristes si pierden, pero al rato les ves felicitando al campeón como todos. Lo mejor es que todos han jugado el mismo número de partidos, y todos tuvieron el premio de pisar el césped del Arena Corinthians, un estadio que sirvió para inagurar el pasado Mundial de Brasil", recordó.
El reto sigue creciendo y el objetivo es ir a más para permitir que el número de jugadores entre 10 y 12 años no deje de crecer. "Me quedo con las palabras de Dario Marchetti, Director general de Danone en Brasil, que nos alertó de las necesidades del fútbol base, algo que ya hizo Cafú en su comparecencia. Ellos querían pasar de 5.000 a 50.000 niños. Ojalá no se pierda nunca este horizonte, para nosotros el principal objetivo es que los niños puedan disfrutar de este deporte y tener un crecimiento más sano y hábitos saludables de alimentación", explicó.
"El techo es muy ambicioso, pero debe ser así. Es bueno para su vida saludable y también para el desarrollo cognitivo, y eso lo hemos vivido gracias a las Escuelas Deportivas de Danone (EDD). El deporte sirve como integración social y los niños que se desarrollan haciendo deporte presentan mejores resultados en el colegio que aquellos que no hacen deporte. No tantos niños hacen deporte en este país, es algo con lo que tenemos que luchar desde ya", avisó Bosch.
"¿POR QUÉ NO ÁFRICA PARA 2016?"
En relación a la sede de la XVI edición, Carlos Bosch no quiso desvelar las cartas, pero recordó que "Danone está siempre con el fútbol". "Estuvimos en Polonia hace dos años, con motivo de la Eurocopa, también en Sudáfrica en 2010, por el Mundial, y ahora hemos jugado en Brasil, también por la reciente cita. El próximo año no hay gran acontecimiento, ¿por qué no África?", añadió el máximo responsable de la competición en España.
"Los niños son quienes se encargan de recordar a los adultos que el fútbol es sólo un juego. A ellos, tanto la victoria como la derrota se les olvida a los diez minutos. Lo mejor es que este torneo trata a los niños como niños. No sólo hacen fútbol, sino que desarrollan actividades lúdico-educativas para concienciarles que deben comer un poquito de todo y no un mucho de algo. También conocen el país y la cultura del sitio donde han venido. Estas cosas hacen que el torneo no sólo sea fútbol, si no el 'Mundial de los alevines'", destacó.
"ALBERTO MORENO GUARDA UN GRAN RECUERDO".
Por su parte, en relación a los grande nombres que han pasado por esta competición, Bosch recuerda al actual jugador del Liverpool, Alberto Moreno, en una nómina que recoge más de un ilustre. "Es un referente para la DNC. Ganó la competición con el Sevilla y a nivel mundial con la selección. Ha sido la única vez que la ganó España. Tiene muchos recuerdos, hace poco estuvimos allí y nos enseñó la medalla, la cual guarda con mucho cariño", comentó.
"Pero no sólo Alberto, sino que los hermanos Dos Santos o Phil Jones, por poner un ejemplo, jugaron la Danone Nations Cup antes de saltar a la fama. Nos alegra, pero en cualquier caso nuestro objetivo no es ese. El objetivo es que los niños --a través del fútbol-- tengan una vida saludable", espetó.
Por último, Bosch se mostró encantado del crecimiento que ha tenido el torneo en España, donde reúnen a más de 41.000 niños gracias al esfuerzo de muchas federaciones territoriales. "Es un proyecto fantástico, a la fiesta del fútbol son muchas las canteras que se han unido. Sevilla, Levante, Atlético de Madrid, Espanyol, Villarreal, Celta, Tenerife y Málaga, por citar algunas. Este año ganó el Cornellà, un equipo no tan conocido, pero con una excelente cantera en Catalunya".
"Es una pena que no pudieran superar la primera fase. Fue mucho más fuerte que el resto de los rivales, pero el fútbol es así. También es una gran lección para ellos, no siempre gana el mejor en este deporte", sentenció Carlos Bosch, quién se emociona cuando los peques le dedican un gol. "En 2013 quise vivirla desde dentro y Miguel, un chico del Levante, me vino a abrazar. Esto es lo mejor de todo. El año pasado un niño saliendo del torneo --después de haber perdido-- vio mi nombre en el diploma que les entregamos y me pidió un autógrafo. Son naturales, espontáneos. Te vinculas a ellos", finalizó deseando ¡larga vida! a la DNC.
