LISBOA, 10 Ago. (EP/Reuters) -
El técnico del Manchester United, Alex Ferguson, ha viajado este martes a Lisboa para comparecer en calidad de testigo en la defensa de su ex asistente en el banquillo británico, el luso Carlos Queiroz, tras los cargos que le se le han imputado tras insultar a la comisión antidopaje portuguesa el paso mes de mayo.
"Sí, por supuesto que debería continuar como entrenador nacional en Portugal. Es muy difícil encontrar a buenos hombres en el mundo del fútbol y Carlos (Queiroz) es uno de ellos. Compartimos seis años fantásticos y, por supuesto, debería quedarse", ha comentado el escocés tras declarar en la Federación Portuguesa de Fútbol (FPF).
Este organismo está investigando las acusaciones que recaen sobre el seleccionador de Portugal, ya que presuntamente insultó a los doctores antidopaje durante una visita sorpresa en mayo, cuando la selección lusa se preparaba para el Mundial de Sudáfrica, y tras la cual estuvo en el aire el puesto del propio Queiroz.
Además, Ferguson, que ha acudido a la ciudad lisboeta ante la llamada de su amigo Queiroz, al igual que el ex futbolista Luis Figo y los presidentes del Oporto y del Benfica, ha comunicado que los controles antidopaje se han vuelto muy exigentes en los últimos años.
"Es comprensible que en la situación de Carlos, en la preparación previa para una Copa del Mundo como estaba, este hecho supusiera un gran inconveniente para que pudiera ejercer su trabajo: no creo que sea una situación agradable para él, porque la reputación es muy importante en el fútbol. Esperemos que se resuelva pronto y pueda seguir adelante con su vida", ha sentenciado.
