MADRID, 23 Feb. (EUROPA PRESS) - El presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), José Luis Astiazarán, apostó hoy en el Senado por "coordinar las fuerzas" para atajar los comportamientos xenófobos, racistas y de violencia dentro del mundo del deporte y, en especial, en el fútbol. Durante su comparecencia ante la Comisión Especial estudio para erradicar el racismo y la xenofobia del deporte español, creada en marzo de 2005 en el Senado, Astiazarán recordó que todas las instituciones tienen "la obligación de colaborar en la adopción de medidas contundentes para luchar combatir cualquier brote de este tipo". En este sentido, destacó la existencia de un protocolo de actuaciones contra el racismo, la xenofobia y la intolerancia, firmado por todos los agentes del mundo del fútbol, y que divide su marco de actuación en tres campos "prevención y protección, localización y control de participantes en los incidentes, represión y sanción". Además, destacó la implicación en este tema de Liga y Federación que próximamente publicarán de forma conjunta "una guía de actuaciones contra el racismo en el fútbol". Astiazarán habló de la necesidad de realizar medidas de "sensibilización" para actuar contra actitudes que "amenazan los valores que deben prevalecer en el deporte y en el fútbol". Igualmente, subrayó la implicación de los clubes en esta faceta. Un papel que afirmó fue destacado en el último Foro contra la xenofobia celebrado recientemente en Barcelona y aseguró que ya está desterrado los apoyos a grupos ultras como sucedía anteriormente. "En los estadios ya no hay lugares en los que los seguidores guarden sus pancartas y eso se demuestra con las inspecciones periódicas de las que son objetos los mismos y los grupos ultras ya no reciben ningún tipo de financiación", reflejó. Astiazarán anunció que se trabaja para jurídicamente para encontrar la fórmula que "imposibilite la venta de entrada y el acceso a los estadios de las personas implicadas en este tipo de acciones" y para atenuar "la supuesta responsabilidad de los clubes siempre que ayudan a la identificación de las personas que actúen así". También aseguró que desde la LFP se trabaja para "mejorar la tecnología y dotar a los clubes de recursos para tener un mejor control de los aforos" y en este sentido recogió una vieja reivindicación de la LFP al solicitar un aumento de los ingresos provenientes de la Quiniela, actualmente es del 10 por ciento, que apuntó "se invierten en realizar estas mejoras y no en hacer fichajes". Entre otras de las últimas medidas adoptadas, el presidente de la patronal apunta "el estudio de acciones legales contra titulares de páginas web que utilicen y publiquen temas relacionados con estos hechos", así como "regular la asociación de hinchadas para contar con un mayor control". Astiazarán destacó el trabajo realizado en este sentido por el Consejo Superior de Deportes y por el secretario de Estado, Jaime Lissavetzky, que "dan cobertura e impulsan todo este tipo de acciones" y por el Observatorio Nacional contra el racismo, que calificó "la herramienta fundamental en la lucha contra el dopaje" y al que la LFP destina una partida económica. Un Observatorio Nacional contra el racismo donde el presidente de la LFP apuntó es necesaria la presencia de algún representante de los medios de comunicación que "tienen un importante papel a desempeñar en este sentido y que siempre se han hecho eco y se han significado para erradicar el racismo". Astiazarán, el sexto compareciente ante la Comisión Especial del Senado después de que Lissavetzky el pasado 29 de septiembre abriese el turno de los mismos, finalizó apuntando que el "objetivo de la Liga es la máxima integración intercultural", aunque reconoció que no está en condiciones de asegurar que el problema del racismo y la xenofobia estará en algún momento "controlado al cien por cien".
