ZURICH (SUIZA), 20 Oct. (EP/Reuters) -
Reynald Temarii, vicepresidente de la FIFA, confía en que la investigación sobre las acusaciones de que está vendiendo sus votos a las candidaturas para los Mundiales de 2018 y 2022 le exima de cualquier comportamiento ilegal.
El tahitiano, presidente de la Confederación Oceánica de Fútbol (OFC), fue acusado por el 'The Sunday Times' de haber pedido 2,27 millones de dólares (más de millón y medio de euros) para fundar una academia deportiva en las instalaciones de la OFC a cambio de sus votos. La Comisión Ética de la FIFA inicia este miércoles una investigación al respecto.
"No tengo intención de dimitir y he solicitado un interrogatorio personal en frente del Comité Ético. Estoy convencido al cien por cien de mi integridad", señaló Temarii en la web 'www.insideworldfootball'.
Temarii y Amos Adamu, compañero en el Comité Ejecutivo de la FIFA y que también es señalado por el diario británico de pedir casi 800.000 dólares (más de 578.000 euros) para un proyecto personal a cambio de votos, se enfrentan a la suspensión e incluso a la expulsión si son culpables.
"Tengo ciertos elementos que creo que probarán mi inocencia y que soy un hombre honesto. El Comité Ético me dirá si tengo razón o no. No estoy impactado por estas revelaciones porque sé lo que hice y lo que tengo que hacer. Sólo se han escuchado 15 segundos de la entrevista, quizás se deberían escuchar los 45 minutos, entonces se entenderá todo", sentenció.
