BARCELONA, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El delantero Walter Pandiani manifestó hoy que los jugadores del RCD Espanyol deben aportar más de sí mismos para mejorar la situación del equipo, que afronta este ante la Real Sociedad un partido que puede ser decisivo para el futuro del entrenador Ernesto Valverde.
Los jugadores del Espanyol mantuvieron hoy una charla sin la presencia del técnico para analizar y debatir los problemas del equipo en una semana en que han sufrido la eliminación de la Copa del Rey, en la que defendían el título, ante el Rayo Vallecano.
Pandiani cree que los jugadores, él incluido, deben hacer "autocrítica" y que espera que a partir de esta reunión "cambie todo". El uruguayo apuntó la necesidad de aumentar el nivel en los entrenamientos para tener más posibilidades de ganar los partidos.
"Hay que dejarlo todo en los entrenamientos porque, si no trabajamos bien entre semana, tampoco es fácil ganar los partidos el fin de semana", dijo, aludiendo a un "cambio en la forma de trabajo", que luego aclaró se refería a los propios jugadores.
"Nosotros somos los que jugamos y debemos mirarnos a nosotros y darnos cuenta de que no estamos haciendo las cosas como debemos", afirmó el ariete. Además, mantuvo que los jugadores tienen "plena confianza" en el entrenador Ernesto Valverde.
"Estoy haciendo autocrítica del grupo. La forma de trabajo no está mal, lo que está mal es que cada uno debe poner un poco más. Tenemos que trabajar un poco más todos. El respaldo al técnico está en el grupo, pero nosotros hemos de poner un granito de arena más", expuso.
Pandiani también se mostró comprensivo con los aficionados y ve normal su descontento, e insistió en que los jugadores "pueden dar mucho más de sí". "Yo soy el primero que tengo que trabajar más. No vengo jugando y necesito trabajar más para estar en el once", añadió.
En cuanto a la Real Sociedad, que buscará ante el Espanyol su primera victoria en esta Liga, el delantero uruguayo comentó que es otro equipo en una situación "difícil" y que el del domingo en Anoeta será un partido "clave", aunque no lo considera "a vida o muerte".
