MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El portero del Real Zaragoza Roberto Jiménez reconoció que "escuece un poco" cuando cuestionan tu trabajo tras las acusaciones del presidente del Granada, Enrique Pina, sobre la no limpieza de la competición y la desconfianza en el árbitro seleccionado para el encuentro del pasado sábado, de origen aragonés.
"Este árbitro no era conveniente para este tipo de partido. Ahora mismo ya puede ir a Zaragoza tranquilo y que le pongan un monumento", dijo Pina al término del encuentro. El meta Roberto despojó de interés las declaraciones del máximo mandatario nazarí. "Hay que darle la mayor normalidad posible. Esta normalidad es lo que nos está dando estas cosas", indicó.
"A nadie le gusta que cuestionen su profesionalidad. Lo que estamos haciendo es muy difícil y lo que vivimos internamente nadie lo sabe. Hay mucho trabajo detrás y es increíble. Escuece un poco que duden de tu trabajo. Sabemos que hacemos las cosas con claridad y deportividad. Quiero pensar que el que duda y hace estas declaraciones lo hace por los nervios del mundo y por lo que todo esto conlleva", dijo.
"El no haber hecho nada raro nos lleva a continuar con el trabajo más serio, disciplinados y, de hecho, así tiene que ser hasta el domingo después del partido. Todo se resume ahí. Si no hacemos el esfuerzo todo esto no habrá servido para nada", manifestó el portero fuenlabreño.
"Si la situación de esta temporada vale para algo es para que sepamos afrontar el siguiente partido como si fuese el último. Éste, verdaderamente, lo es porque no hay nada detrás y nos puede dar la salvación", indicó el cancerbero madrileño, que aseguró estar muy "acostumbrado a esta presión y no va a ser problema este domingo".
"Queremos pensar que lo tenemos más difícil de conseguir y debemos salir al cien por cien. Si no crees en lo que haces es imposible conseguirlo. Tenemos que aprovechar esta oportunidad", finalizó Roberto, quien se rindió nuevamente a la afición maña. "No hace falta mensajes. Nos están dando una lección ellos a nosotros".
