Mourinho vuelve a aludir a las ayudas arbitrales al Barcelona en vísperas de su regreso al Camp Nou

Actualizado: lunes, 30 octubre 2006 21:00


BARCELONA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -

El entrenador del Chelsea FC, José Mourinho, volvió a aludir hoy a las ayudas arbitrales que bajo su punto de vista está recibiendo el FC Barcelona en la Liga española en la actual temporada, esta vez por el penalti señalado a favor de los azulgrana ante el Recreativo de Huelva por una caída del ex jugador del Chelsea Eidur Gudjohnsen, en vísperas de su regreso al Camp Nou, donde ambos equipos se enfrentan mañana en la cuarta jornada de la primera fase de la Liga de Campeones.

Mourinho se refirió hasta en tres ocasiones al polémico penalti sobre Gudjohnsen y terminó ironizando sobre el 'teatro' que hizo el islandés. "Preguntadle a Eidur", concluyó la comparecencia, después de que le preguntasen si esperaba ver teatro en el Camp Nou aludiendo a la acusación que el técnico portugués lanzó en esos términos contra Leo Messi tras el partido de la pasada campaña en Stamford Bridge, en el que fue expulsado Asier Del Horno por una entrada sobre el argentino.

Al comienzo de una multitudinaria rueda de prensa en su vuelta al Camp Nou por tercer año consecutivo, Mourinho también aludió al arbitraje. "Quiero ignorar lo que pasa en la Liga española, si fue penalti o no o si han recibido o no alguna ayuda. No lo quiero comentar, pero sé cuántos penaltis a favor ha tenido el Barcelona o cuántas veces han jugado contra 10 jugadores. Quiero que mi equipo sea el mejor, como también lo quiere el Barcelona, y que también lo sea el árbitro", comentó.

El entrenador del Chelsea también citó a Gudjohnsen durante la comparecencia para comentar que le sorprendió su caída en el partido ante el Recreativo "porque ha jugado toda la vida en Inglaterra", dijo, aunque luego quiso matizar que no critica al islandés, ex jugador de su equipo en las últimas temporadas antes de fichar este año por el Barcelona, sino que alaba el "juego limpio" del fútbol inglés y de la prensa inglesa, "que no permite que se hagan cosas que se hacen en otros sitios", señaló.

En relación con el Barcelona-Recreativo, Mourinho también confirmó que dejó de verlo por televisión tras el penalti a Gudjohnsen, aunque aclaró que lo hizo "porque empezaba el Oporto-Benfica, el derbi de mi país, y del Barcelona no tenía mucho que ver porque lo conozco suficiente", explicó, asegurando que coincidió el penalti señalado a favor del Barcelona y el comienzo del partido entre sus dos antiguos equipos en Portugal.

UN RECIBIMIENTO MENOS AGRESIVO QUE EL AÑO PASADO

Mourinho, por otra parte, ironizó al final de la rueda de prensa al decir que le sorprende que la prensa no le preguntase por la alineación --hace dos temporadas recitó las alineaciones de ambos equipos en la víspera del partido, aunque al final el Chelsea presentó un cambio respecto al once anunciado-- y también agradeció el recibimiento que se ha encontrado esta vez a su llegada a Barcelona. "El año pasado fue más agresivo", dijo, recordando que algunos hinchas le escupieron en el aeropuerto.

"El año pasado tuve que llevar mi traje a la lavandería y esta temporada no ha pasado nada. Este año he venido del hotel al estadio andando y nadie me ha molestado. A lo mejor mañana es diferente. No espero que la gente me aplauda en el Camp Nou. Espero todo menos eso, pero a mí me da exactamente igual. Lo único que me importa es lo que ocurra durante los 90 minutos", afirmó, dejando claro que su equipo saldrá con el objetivo de ganar el partido.

En cuanto al partido, el entrenador del Chelsea se mostró tranquilo y optimista, debido a la situación de su equipo, líder del grupo con nueve puntos de nueve posibles y que tiene a tiro la clasificación para octavos de final. "No es una eliminatoria. Nosotros necesitamos dos puntos para clasificarnos y el Barcelona necesita seis, pero queremos ganar", indicó. Igualmente, destacó su objetivo de sumar "los tres puntos" y de finalizar la liguilla como primeros de grupo.

Mourinho también explicó que no se toma este partido como una oportunidad para apartar al Barcelona de la ronda de octavos de final y se mostró indiferente ante el futuro de los azulgrana en la competición. "No es mi problema cuál sea el segundo equipo clasificado de nuestro grupo, si es el Barcelona o el Werder Bremen. No tengo ningún problema personal con el Barcelona ni ningún interés en ayudar al Werder Bremen. No es nuestra lucha", señaló.

En este sentido, también dejó claro que no se planteará las próximas jornadas con la idea de ayudar a otros equipos. "No estoy aquí para ayudar a nadie sino para ganar partidos y, pase lo que pase en este partido, iremos a Bremen a ganar, sea o no una ayuda para el Barcelona. Si algún tonto con ideas locas piensa que voy a ir con el segundo equipo para perder en Bremen, es que tiene la mente enferma. El día que yo juegue un partido para perder, me voy a casa y se termina el fútbol", afirmó.

El entrenador del Chelsea también comentó en Barcelona que su equipo esta temporada es "diferente" al de la pasada, ya que antes "jugaba mucho más al contragolpe y aprovechaba más las bandas y esta temporada tenemos más posesión de balón y tomamos más la iniciativa del juego", y también porque cuentan con nuevos jugadores y en definitivo con un equipo "con más experiencia" y varios jugadores "maduros y preparados para grandes partidos como éste".