BARCELONA, 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del FC Barcelona, Frank Rijkaard, no teme que la euforia que rodea a su equipo pueda afectar a los jugadores en el partido de este sábado ante el RCD Espanyol, ya que les acompaña desde la pasada temporada y han demostrado "mucha madurez", aunque cree que puede convertirse en "una trampa muy peligrosa".
"Personalmente no creo mucho en la palabra euforia, que en sí misma ya es exagerada; yo creo en el trabajo, en hacer las cosas como hay que hacerlas. Si trabajamos normal, tenemos posibilidades de lograr algo importante; si exageramos y entramos en el campo con la mentalidad de demostrar, puede ser una trampa muy peligrosa", señaló.
"Como dice Lotina, la Liga está muy igualada y cada equipo te puede complicar la vida", expuso Rijkaard, que aseguró en varias ocasiones que el Espanyol está jugando bien "y puede ganar a cualquier equipo", aunque expresó su confianza en la capacidad del Barcelona para mantener la actual racha de triunfos.
"Yo --explicó-- creo en el trabajo diario, el espíritu de equipo y el compañerismo, y ojalá podamos continuar de esta manera. Ya hemos tratado con la euforia el año pasado y el equipo ha demostrado mucha madurez y está creciendo. Sólo podemos seguir de esta manera, sin pensar en la euforia y afrontando cada partido muy seriamente".
El técnico holandés, de todos modos, no cree que pueda decirse antes de jugar el partido si el derbi llega en buen o mal momento para el Barça y recordó que "la historia siempre nos indica que el derbi es un partido especial". Además, expresó su respeto por el Espanyol, del que también dijo que está "recuperado".
"Es un equipo organizado que se agrupa bien en defensa y nuestro riesgo es que el equipo se alargue demasiado, porque sus delanteros tienen mucha calidad. Hay que actuar como un equipo y estar juntos, teniendo mucha atención a los contragolpes", argumentó, citando luego a De la Peña y a Tamudo, aunque lo primordial es "el colectivo".
Rijkaard, por otro lado, lamentó la baja de Rafael Márquez, que ha recaído de los problemas musculares que sufrió a finales del año pasado. "Es una pena para el jugador y para el equipo, es un jugador importante, pero durante una temporada siempre hay problemas musculares y en su lugar entrará otro que lo puede hacer bien".
Igualmente, el entrenador se mostró resignado al referirse a la marcha de Samuel Eto'o a la Copa de Africa, lo que puede hacer que el delantero esté fuera "más o menos un mes" y se pierda siete u ocho partidos con el Barça, si Camerún llega a la final. "Es así, tiene que irse; así está el reglamento internacional", comentó.
