VALENCIA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Valencia, Quique Sánchez Flores, comentó que el equipo está "a dos puntos de la normalidad", que son los que devolverían al conjunto blanquinegro en puestos de la Liga de Campeones.
El técnico reconoció que el partido de mañana (22:00 horas) contra el Sevilla será "muy complicado" y manifestó que es un encuentro que se afronta "con falta de autoestima, por lo que existe la obligación de dar la cara". "Nos interesa sacar un buen resultado para volver a la normalidad", agregó.
El preparador fue muy gráfico a la hora de explicar la situación por la que atraviesa el Valencia al explicar que "la temporada es una montaña rusa, una veces estás arriba y otras abajo".
El Valencia llega al Sánchez Pizjuán sin el cartel de favorito. "Cuando las apuestas se hacen difíciles es posible que sucedan", advirtió el técnico. "Nosotros andamos reconduciendo un equipo con trabajo táctico e intensidad. Hay que recuperarlo y trabajar mucho para tener autoestima", indicó.
El madrileño dijo que el equipo ha pasado por "situaciones complicadas, pero tiene que recomponerse sobre él mismo" explicando que se quieren jugar partidos para el proceso de recomposición. "Ahora tenemos que ser un poco mejores que el día contra el Bilbao", apuntó.
El preparador 'ché' probó una variante en el esquema táctico con tres centrocampistas y tres delanteros. Sin embargo, dejó claro que no lo utilizará porque "faltan jugadores distintos para plantearse variaciones". "Se adoptó un sistema desde el principio y no podemos meter dudas al grupo, lo que hay que hacer es buscar la mejor versión de lo que sabemos hacer", destacó.
El madrileño no cree que a los jugadores les falte un plus de preparación para evitar las lesiones "porque hace mes y medio se presumía de equipo" y opina que lo que ocurre es que "el jugador, el dirigente y el aficionado se mueve más por las sensaciones últimas".
Además, Quique Sánchez destacó que "el cuerpo técnico tiene que estar en otro equilibrio distinto y es lo que tiene que dar estabilidad al equipos".
Respecto a la plaga de lesiones que sufre la plantilla y las posibles soluciones dijo que el futbolista "sabe el tipo de vida que tiene que hacer si quiere rendir" y preguntado por el estado físico de Vicente, señaló que está "bien, aunque tiene unas sensaciones que pueden cambiar en horas".
"No sabemos cómo estará y no tenemos la fiabilidad de ponerlo de entrada" para el partido contra el Sevilla, advirtió Sánchez Flores que desveló que Edu desveló que se está tomando todo tipo de medicamentos porque tiene un fuerte catarro.
El que no está en la convocatoria es el italiano Francesco Tavano. El preparador levantino dijo del delantero que "trabaja y se esfuerza al máximo para comprender el estilo del Valencia". "Hasta ahora sólo le hemos podido medir en un partido y esperamos que siga mejorando para rendir en un partido de nivel", deseó.
SE AISLA DE LO EXTRADEPORTIVO
El técnico del Valencia parece tener un imán para estar cerca de la polémica sin ser él el que la genere. Tanto es así que ha optado por aislarse cuando las cosas se tuercen. "Me refugio en mi trabajo", afirmó con rotundidad.
El preparador fue preguntado por las noticias que llegaron desde Italia esta semana en sobre el supuesto interés del Valencia en Lippi y que el mismo club desmintió ayer mediante un comunicado.
Sánchez Flores reconoció no saber nada del tema. "Estoy fuera del asunto y el año pasado también sucedió. El fútbol tiene esa locura y si hace mes y medio había cantos de sirena, ahora vienen duras hay que poner la cara", recordó.
El madrileño se vino arriba y subrayó que "habrá que sacar la raza familiar" que tiene para "sacar el equipo adelante y lo haré con todas las consecuencias".
En el descanso del partido entre el Valencia y el Athletic de Bilbao, el director deportivo Amedeo Carboni estuvo en el vestuario. Al técnico no le gustó este gesto y se lo comunicó al presidente "porque entiendo que todos somos empleados del club y debemos saber donde está nuestra parcela". "El vestuario es para la gente que trabaja ese día y no creo que vuelva a suceder", matizó.
El partido de mañana entre el Sevilla y el Valencia lo pitará Mecía Dávila que fue el colegiado que cerró Mestalla por el 'monedazo' de la Copa del Rey de la temporada pasada. "Espero que tenga más suerte de la que tuvo los últimos años. Intentaremos ayudarle para que su labor sea lo mejor posible", adelantó.
De todos modos, el técnico se quejó de las últimas actuaciones arbitrales. "En los últimos partidos se están equivocando respecto a nosotros y nos están respetando poco", concluyó.
