El Sevilla encarrila el pase a octavos de final ante un rival en pleno rodaje

Actualizado: miércoles, 15 febrero 2006 21:57


MOSCÚ, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Sevilla sigue con el buen tono que viene demostrando en la Liga española y encarriló hoy su pase a los octavos de final de la Copa de la UEFA, tras derrotar, en la ida de dieciseisavos jugada hoy en Moscú, al Lokomotiv por 0-1.

Con un intenso frío, de en torno a quince grados bajo cero, y sobre un campo en deficientes condiciones, el partido comenzó con los rusos dispuestos a hacer valer el factor cancha, aunque el Sevilla, con mayor calidad que su oponente, no tardó en asustar a los locales, con un lanzamiento de Kanouté en el minuto 12 que pudo haber sido el 0-1 si el francés cede a Adriano, que esperaba el pase desmarcado.

En el Lokomotiv era Loskov el que más peligro llevaba aunque los moscovitas, que están en plena pretemporada por el parón invernal de su Liga doméstica, y que han renovado a fondo su plantilla, adolecían de un exceso de inocencia ante el portal sevillista.

Poco a poco, el Sevilla fue cogiendo confianza, aunque sin terminar de rematar sus ataques. Para colmo de males, una segunda jugada en la que Kanouté no pasó a Adriano originó un 'pique' entre ambos, que obligó a Martí y Jordi a separarles, en pleno partido, para que la cosa no llegara a mayores.

Tras una primera parte anodina, con un Lokomotiv evidenciando que está en fase de acople, el técnico ruso, Slavoljub Muslin, reforzó el ataque con uno de sus mejores jugadores, Lebedenko, y el Lokomotiv pareció recobrar, por momentos, el empuje del comienzo del partido.

Pero fue de nuevo el Sevilla quien estuvo cerca del gol con un cabezazo de Luis Fabiano, que tuvo una oportunidad cantada en el minuto 48, a pase del siempre activo Daniel Alves.

Se pasó entonces a un momentáneo toma y daca, aunque el Lokomotiv acusaba, con el paso de los minutos, su menor fondo físico frente a un adversario totalmente rodado como el Sevilla que, de nuevo, se acercó al gol, con sendos tiros de Adriano y Luis Fabiano.

Sólo los errores podían complicarle la vida al Sevilla y a punto estuvo de pasar lo peor, en un fallo en el despeje de Notario que salvó Dragutinovic. Pero la superioridad sevillista quedó una vez más de manifiesto en el minuto 63, cuando Adriano, sin ser molestado por la defensa rusa, envió el balón al palo. Los andaluces estaban perdonando, y su técnico, Juande Ramos, puso toda la carne en el asador con el cambio de Luis Fabiano por Saviola.

Pero iba a ser el menos esperado, Jordi López, quien rompiera finalmente, de cabeza, la igualdad en el marcador, tras un córner botado por Martí, que había estado precedido de un posible penalti sobre Kanouté. La faena la completó a renglón seguido el meta Notario, con un paradón a lanzamiento de falta de Loskov, pero el resultado ya era inamovible y, ahora, al Sevilla tan sólo le falta rematar el trabajo en casa, dentro de una semana.