MADRID, 9 May. (EUROPA PRESS) -
La alpinista española Rosa Fernández ya se encuentra en España después de regresar de su intento de ascender al Annapurna y ha confesado que "nunca había nevado tanto" allí arriba, razón por la cual decidió suspender su marcha entre el Campo 2 y el Campo 3 en búsqueda de la cima.
En buen estado físico, la española confesó que los propios sherpas le habían asegurado que "nunca había nevado tanto en el Annapurna", y comentó que muchas noches soñaba con las grandes avalanchas que le privaron de llegar a la cumbre. Ahora, está dispuesta a tomar la bicicleta para realizar este verano la Travesía de Lhasa a Katmandú, pasando por el campo base del Everest, e intentar escalar en septiembre al Shisha o al Cho Oyu.
Por otro lado, al llegar a Madrid, Rosa lamentó la desaparición del montañero húngaro Tivor Horvath, desparecido en el Annapurna el pasado fin de semana y que tenía su tienda instalada junto a la asturiana en el Campo Base. "Siento mucho la desaparición de Tivor Horvath. El montañero húngaro había colocado su tienda junto a la mía en el campo base del Annapurna y tenía fuerza, juventud e ilusión", apuntó.
"Dicen que pudo desaparecer por culpa de una avalancha. Las estadísticas del Annapurna se cumplen escrupulosamente y tanto yo como Carlos Soria sabíamos que intentar llegar a la cumbre encerraba muchísimo peligro", añadió.
Además, comunicó su próximo reto. "Vamos a realizar este verano la travesía del Himalaya y luego concretaré con mi gente si subo al Shisha, de 8.027 metros de altura o si me enfrento al Cho Oyu, de 8.201, la sexta montaña más alta del planeta. La bicicleta me permitirá adaptarme nuevamente a la altura y luego en septiembre intentar mi séptimo ocho mil", señaló.
La montañera asturiana ya ha descartado intentar subir al K-2, ya que ha permanecido más tiempo del planificado en Nepal. Con relación al Annapurna, comentó que "nunca la montaña se había mostrado tan violenta y con tanta nieve". Rosa siempre ha estado muy unida al abulense Carlos Soria, que también decidió dejarla para el año que viene.
"Tendré que disponer de un informe meteorológico muy favorable para volver a intentarlo. El Annapurna me ha demostrado hasta que punto su fama de montaña peligrosa es verdad", finalizó.
