GRAZZ (AUSTRIA), 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
El piloto español Ander Vilariño, ingresado en el Hospital Universitario de Graz, donde anoche fue operado durante cuatro horas para restaurarle su rótula dañada, presenta unas décimas de fiebre sin importancia y podría recibir el alta el miércoles.
El piloto vasco, aún con molestias, quiso dar las gracias por al trato y por el apoyo recibido. "Gracias, de corazón, a todo el mundo. Estoy bien, aunque no puedo ocultar que esto duele. Creo que soy afortunado, ya que los médicos me han dicho que esta lesión no ha afectado por muy poco la zona de la anterior que sufrí hace años. Ahora sé por experiencia lo que me toca, descansar y luego una dura rehabilitación", comentó.
Por su parte, su padre Andrés, explicó que "dada su juventud y su gran estado de forma, en unos cuatro meses puede estar al cien por cien". "En nuestro deporte pasan estas cosas, es el tributo a lo que eres. Afortunadamente, la FIA se toma muy en serio sus competiciones y las medidas de seguridad funcionan", explicó.
"Ander acabó con el casco roto por e impacto. Ha tenido mucha suerte. La operación ha sido un éxito y se le ha trenzado la rótula con alambre y clavos ya que se había partido en cuatro o cinco partes", destacó.
Por su parte, su hermana Angela, quiso rendirle homenaje y logró conquistar el Trofeo europeo femenino, además de lograr la segunda plaza 'scratch' entre todos los F-2000 inscritos.
