Badillo, García, Villaécija y Costa logran la marca necesaria
MÁLAGA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
La nadadora española Mireia Belmonte ha liderado en Málaga la primera jornada del Open de España, que se está celebrando en el centro acuático de la ciudad andaluza, en un estreno en el que se firmaron hasta cuatro mínimas que certifican el billete para los Juegos de Londres del próximo verano.
Las cinco mínimas llegaron de golpe en sólo dos pruebas. Conchi Badillo (CN Sabadell) y Marina García (CE Mediterrani), en los 100 braza; y Mireia Belmonte (CN Sabadell), Erika Villaécija (CN Sant Andreu) y Melanie Costa (CN La Salle Palma), en los 800 libre, lograron bajar de los tiempos exigidos para ir a los Juegos.
Por orden cronológico, la primera mínima llegó en los 100 braza. Conchi Badillo, últimamente ausente de las convocatorias nacionales, volvió a su mejor estado de forma. La jerezana ya dejó claro por la mañana que iría a por la mínima con ese 1:08.95 de las series.
Había que bajar de 1:08.49 y ni por un instante estuvo en peligro conseguir la meta. La presencia en la calle vecina de Marina García fue todo un reto para ambas y el tiempo de las dos por debajo de las exigencias olímpicas así lo demuestra. Conchi paró el crono en 1:07.97 y Marina lo hizo en 1:08.15. La séptima y novena mejores marcas mundiales del año 2012.
Y luego, en la última prueba de la tarde, se cumplieron los pronósticos y las tres aspirantes a la plaza olímpica cumplieron de forma rigurosa. Belmonte, Villaécija y Costa bajaron del 8:33.84. Mireia se lanzó desde la primera brazada a por ello y manteniendo un ritmo muy regular acabó la prueba con un registro de 8:25.55, que supone la segunda mejor marca mundial del año sólo por detrás de la británica Rebecca Adlington (8:18.54).
Erika Villaécija, ya con el pasaporte para la prueba de los 10.000 metros en Aguas Abiertas, aspiraba a estar en su verdadera prueba, los 800, en los Juegos, y yendo a remolque de Mireia toda la prueba y viglando la progresión de Melanie Costa, acabó con un tiempo espléndido de 8:27.76, que es mínima y además la quinta mejor marca mundial de 2012.
A tres brazadas de Erika llegó Melanie con su 8:30.96, que es mínima pero que la deja a expensas de las decisiones técnicas --sólo pueden ir dos nadadoras por prueba--, pero con un gran mérito por haber superado un proceso viral en las últimas semanas y porque su verdadera aspiración está en los 200 y los 400 libre.
RAFA MUÑOZ RECUPERA SENSACIONES.
En el resto de pruebas, aunque sin mínima olímpica, destacó la buena actuación de Rafa Muñoz. El cordobés recuperó sensaciones en los 50 libre pensando en los 100 mariposa. Muñoz, en la piscina donde logró su récord mundial, volvió a sentise bien y en una prueba que no es la suya realizó un excelente 22.69, que si bien no le clasifica para Londres, sí le posiciona para afrontar su verdadero reto.
La versión femenina del 50 libre tenía a María Fuster (CN Palma) como principal opción para asaltar la clasificación olímpica, aunque con escasas posibilidades. La palmesana nadó en 25.94, lejos de ese 25.27 pedido, pero de momento le queda el 100 libre y demostrar que puede ser miembro del relevo 4x100 estilos, que ya tiene su plaza conseguida.
Los 100 braza masculinos no vieron en escena a Melquiades Alvarez (CN Sant Andreu) pese a que en series había sido el más rápido (1:02.33). Sabedor de que la gesta era complicada, prefirió guardar pruebas para los 200 braza en los que se bate mejor. En su ausencia, el pabellón español lo defendió Fernando Morillas (CN Granollers), que con un tiempo de 1:03.13 fue segundo tras el irlandés Johan Sveinsson (1:02.47).
No acabaron aquí las buenas noticias de este histórico 800, porque otras dos nadadoras lograron también la mínima por la que peleaban. Se trata de María Vilas (CN Riveira) (8:47.03) e Irene Andrea (Madrid Moscardó) (8:57.57), que con esos tiempos han logrado la mínima para el Europeo Junior de Eindhoven.
