PEKÍN, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -
El francés Alain Bernard fue el gran protagonista de la sexta jornada en el 'Cubo de Agua' de los Juegos Olímpicos de Pekín, tras alzarse con el oro en una de las pruebas reinas --los 100 libres--, donde batió a su principal rival y actual poseedor del récord del mundo, el australiano Eamon Sullivan, en otra pésima jornada para los españoles.
Esa fue la espina que no se pudo sacar el nadador galo, que completa con su metal dorado un año de ensueño tras su título de campeón continental en Eindhoven. Bernard paró el cronómetro en 47.21 segundos, insuficientes para desbancar los 47.05 del 'aussie'.
En esta guerra en la que uno quita la plusmarca al otro y viceversa --como ocurrió en la tanda de semifinales hasta en dos ocasiones-- salió perdedor Bernard, que llegó a Pekín con el récord bajo el brazo y ha visto cómo el australiano ha dejado su registro finalmente por encima.
Sin embargo, la sonrisa en el podio perteneció al francés que aunque haya perdido una batalla es consciente de que la guerra ha sido cosa suya. En esa misma prueba, y al margen de la rivalidad Bernard-Sullivan, el bronce fue compartido por un estadounidense y un brasileño.
Jason Lezak y Cesaar Cielo Filho establecieron un crono final de 47.67 y privaron de obtener un sitio en el podio al mítico holandés Pieter van den Hoogenband, que finalizó quinto, lo que le sirvió para anunciar su retirada del mundo de la natación a sus 30 años.
SENSACIONAL JORNADA PARA CHINA
Al margen de la prueba estrella, China consiguió firmar una excelente jornada merced a tres medallas, una de ellas de oro, la primera para los anfitriones en el 'Water Cube'. Inauguró la nadadora china Zige Liu, que cautivó con su triunfo en los 200 mariposa y después saltó la sorpresa en el relevo 4x200 libres, donde sumaron la plata.
Pero es que en la prueba que Liu se colgó el oro, que estableció un nuevo récord del mundo, el segundo lugar también fue para su compatriota Liuyang Jiao, que supo aprovechar el bajón de la australiana favorita Jessicah Schipper, para subirse al segundo peldaño.
En ese mismo relevo, el del 4x200, Australia asombró al mundo con un ejercicio perfecto de compenetración y rapidez para destrozar el récord del mundo --en manos de Estados Unidos-- en seis segundos y sumar así una medalla más en natación.
Algo que también hizo el japonés Kosuke Kitajima, que se proclamó campeón olímpico en la distancia de 200 braza tras marcar un tiempo de 2:07.64, suficiente para hacer el doblete después de su victoria en los 100 metros de la misma disciplina en estos Juegos.
Por su parte, el gran protagonista de la piscina, y de todos los Juegos de Pekín, el estadounidense Michael Phelps, que no hoy no tuvo ninguna final para seguir acumulando metales dorados, tomó parte en las 'semis' de los 200 estilos en las que se impuso sin grandes problemas.
VILLÁECIJA FALLA EN SU PRUEBA FAVORITA
Por otra parte, la delegación nacional volvió a fallar en las series vespertinas. Así ni Érika Villaécija (800 libres) ni Escarlata Bernard y Lydia Morant (200 espalda), ni Javier Noriega (50 libres) ni Rafa Muñoz (100 mariposa) lograron el pase a la siguiente ronda.
La barcelonesa defraudó al no poder clasificarse para la final de los 800 metros, distancia en la que es vigente subcampeona de Europa, y lo achacó a las molestias de salud que ha sufrido en los últimos días en Pekín.
La catalana terminó su participación en el 'Cubo de Agua' con una decepcionante sexta plaza en su serie y un registro de 8:32.27, muy lejos del 8:24.08 que atesora como récord de España y que le sirvió en Eindhoven para colgarse la plata continental.
Villaécija llegaba a Pekín como principal baluarte en la piscina y avalada por su quinta plaza en Atenas 2004 y su cuarta posición en el Mundial de 2007 en Melbourne. Sin embargo, se marcha de la cita asiática sin haber conseguido clasificarse para ninguna final ya que también falló en la prueba de 400 metros libres.
Noriega y Muñoz fueron séptimos en sus respectivas series, Morant, tercera, y Bernard, última en la suya. El estadounidense Michael Phelps, por su parte, estuvo esta tarde en las series de 100 mariposa y se clasificó para 'semis' con el segundo tiempo, superado por el serbio Milorad Cavic, que firmó un nuevo récord olímpico (50.76).
