ATENAS, 30 Mar. (EP/Reuters) -
La antorcha olímpica de los Juegos de Pekín llegó ayer a la Acrópolis ateniense rodeada de un dispositivo de seguridad sin precedentes para evitar que los activistas que apoyan a Tíbet interrumpan el relevo de la llama.
Varios helicópteros sobrevolaron al portador de la antorcha, que estuvo rodeado por una gran cantidad de vehículos y por cientos de agentes de la Policía. La llama permanece a estas horas encendida en el histórico enclave elevado de Atenas, donde será entregado en la mañana del domingo a los representantes del Gobierno de China.
Además, las autoridades griegas cambiaron varias veces durante el día de ayer el recorrido de la llama, en lo que supone la primera vez que se toman tales medidas de seguridad desde que comenzó la tradición del relevo de la antorcha, en los Juegos Olímpicos (JJOO) de Berlín de 1936.
Los temores de las autoridades se deben a que el pasado lunes varios activistas de Derechos Humanos y manifestantes tibetanos interrumpieron el encendido de la llama en Olimpia, televisado en todo el mundo. Los infractores rompieron e cordón de seguridad y desplegaron pancartas reivindicativas mientras los organizadores del evento de Beijing realizaban su discurso.
Estas y otras protestas estropearon el inicio del relevo, con manifestantes tendidos en el suelo frente a los vehículos del séquito de la llama y deteniendo a los corredores en repetidas ocasiones.
China domina Tíbet desde 1950, cuando lo invadieron, y culpan al líder exiliado de la región, el Dalai Lama de conspirar y crear "terror" antes de los JJOO, que tendrán lugar del 8 al 24 de agosto.
