España se juega los cuartos a una carta asequible
PEKÍN, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
La selección española de balonmano cerrará el lunes contra Brasil (4.45 hora española) la primera fase de la competición masculina, dentro de los Juegos Olímpicos de Pekín, en la que su rendimiento irregular le ha obligado a jugarse a una carta la clasificación para cuartos, ya que una derrota otorgaría la última plaza del grupo a los brasileños.
Hasta el momento, la andadura de España en el torneo se alterna con victorias frente a China y Polonia y derrotas ante Croacia y Francia, dos de las grandes favoritas al oro. De esta forma, los de Juan Carlos Pastor caminan por la cuerda floja y sólo un triunfo o un empate frente a Brasil permitiría seguir en la lucha por las medallas.
Para lograr este imperioso triunfo, el combinado nacional necesita recuperar la confianza en su juego, muy mermada tras el trasquilón sufrido ante los franceses en la última jornada (21-28). En ese partido, la defensa fue un coladero y el ataque sufrió un colapso derivado del excesivo individualismo, como bien explicó el capitán David Barrufet después.
Ante un rival teóricamente asequible que sólo ha ganado un partido de cuatro, Pastor dispone de la última oportunidad para recuperar los automatismos en el juego que permitieron ganar aquel mágico Mundial en Túnez hace tres años. Una victoria el lunes combinada con una derrota de Polonia, que jugará contra la invicta Francia, podría elevar a España hasta el tercer puesto del grupo.
En cualquier caso, no parece que esta vez la plaza final en la primera fase sea tan importante como en otros torneos, debido a la anarquía que reina en el igualadísimo grupo B, donde todas las selecciones han perdido al menos un partido. En caso de cumplir los pronósticos contra Brasil, el rival de España en cuartos de final saldría del puñado de equipos que conforman Corea del Sur, Alemania, Islandia y Dinamarca.
