ZARAGOZA, 19 May. (EUROPA PRESS) -
El consejero municipal de Fomento y Deportes del Ayuntamiento de Zaragoza, Manu Blasco, atribuyó hoy a un "síntoma de debilidad de una candidatura sin consenso" la decisión del alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, de relegar el proyecto de los Juegos de Invierno 2022 para apostillar que "los síntomas de debilidad son malos".
Blasco añadió que recientemente CiU le recordó a Hereu que "entre la debilidad de la candidatura olímpica y el fracaso del referéndum de la Diagonal no tenía proyecto para Barcelona".
En declaraciones a los medios de comunicación, Manu Blasco quiso dejar claro que la situación de la candidatura Zaragoza-Pirineos 2022 es "de consenso político y social y alta participación" para puntualizar que por ahora "no nos supone grandes gastos".
Manu Blasco abogó por seguir trabajando en la candidatura olímpica porque el siguiente paso será en el 2015 cuando el Comité Olímpico Internacional (COI) elija la candidatura para los Juegos de Invierno de 2022, pero "hasta entonces no se precisan de grandes inversiones y después de 2015 se superará con creces la situación económica actual".
"SENTENCIA DE MUERTE"
Así, se mostró tajante al señalar que "Zaragoza no se plantea dejar de ser candidata, sino trabajar en el proyecto" que comparativamente con el de Barcelona "no tenía apoyo político y socialmente estaba poco trabajado lo que es su sentencia de muerte".
Para Manu Blasco, el "dejar en stand-by" quizá obedezca a que "Barcelona estaba sola, mientras que la de Zaragoza tiene el apoyo de cinco instituciones" en referencia al Gobierno de Aragón, la Diputación de Huesca y los Ayuntamientos de Zaragoza, Huesca y Jaca.
Tras la decisión del alcalde de Barcelona, Blasco opinó que "es difícil que la candidatura pueda recuperarse con tiempo para ser válida".
Sobre la petición de los grupos de la oposición de IU y CHA para que el Ayuntamiento de Zaragoza abandone otros grandes proyectos, Manu Blasco, dijo que supondría "parar proyectos de futuro que económicamente tendrían un ahorro, pero dejaríamos de sembrar para el futuro".
Así, defendió tanto los Juegos de Invierno, como Expo Paisajes 2014 o el nuevo estadio de fútbol porque "generan empleos e inversiones y son una posibilidad de desarrollo" en los próximos años.
Para Blasco, la relación "ahorro-inversión no guarda proporción" y renunciar a estos proyectos supondría "ganar unos primeros aplausos, pero no serviría para salir del agujero si ahora nos ahorráramos unos 100.000 ó 150.000 euros".
