Los estadounidenses se muestran muy superiores al ceder un solo set
WINSTON SALEM (ESTADOS UNIDOS), 7 Abr. (EUROPA PRESS) -
El equipo español de Copa Davis se despidió hoy de la competición tras sufrir un contundente 3-0 en los cuartos de final ante Estados Unidos, en los que sólo pudo arrancar un set, confirmándose las previsiones que advertían de la debilidad nacional sobre la pista rápida 'indoor' que habían preparado los estadounidenses en Carolina del Norte y, sobre todo, tras la ausencia del número uno de España, Rafael Nadal.
Los hermanos Bryant sólo tuvieron que cumplir hoy su parte del trabajo, la de asestar la puntilla definitiva a los españoles, que se habían presentado al dobles con un desolador 2-0 en contra, que presagiaba lo que iba a suceder hoy. En este ocasión, la pareja formada por Feliciano López y Fernando Verdasco, aunque plantó cara dignamente, no pudo repetir el triunfo logrado ante Suiza.
Los doblistas norteamericanos, números uno del mundo y que sólo han perdido uno de los doce partidos que han disputado en la Davis, contando este último, ya eran de este modo en la víspera el punto más inaccesible para el equipo nacional, y confirmaron la condición sentenciando el pase a semifinales con un 7-5, 6-3, 3-6 y 7-6(7/5), pese a ceder el único set del equipo en la eliminatoria.
Estados Unidos cumple así su cumplida revancha de lo sucedido en la final de la edición de la Davis celebrada en Sevilla en 2004, cuando un bisoño Nadal, con 18 años, ganó un providencial punto a Andy Roddick tras más de tres horas y media de partido y entró en la historia como el tenista más joven con una victoria en la final de la competición para ayudar al triunfo de España por 3-2.
Los americanos, favorecidos por la pista rápida 'indoor' recubierta de un acrílico ('latex-ite') por la que apostaron, conscientes de las dificultades hispanas lejos de la tierra batida, se han mostrado como una apisonadora en su propósito de recuperar un título que no logran desde hace doce años, pese a erigirse en el equipo que más 'Ensaladeras' acumula.
EL PRINCIPIO DEL FIN
El principio del fin para España se produjo cuando la apuesta del capitán Emilio Sánchez Vicario para el primer encuentro ante Roddick, el madrileño Fernando Verdasco, no supo cómo dar continuidad al inicio de encuentro con el que sorprendió al americano, que una vez superado el aprieto del primer set, se amparó en su mejor arma, el saque para ganar 7-6(7/5), 6-1 y 6-4.
Tampoco Tommy Robredo, la primera raqueta nacional, que volvía al equipo tras su ausencia ante Suiza por petición personal, tuvo opciones ante James Blake (6-4, 6-3 y 6-4), al que al igual que en el segundo partido de la eliminatoria sólo supo aguantar en el desarrollo de la primera manga. Después, con un servicio excepcional y una derecha poderosa, el norteamericano se convirtió en un jugador inaccesible para el español.
Finalmente, la ausencia de Nadal, justificada para recuperarse plenamente de unas molestias físicas de cara al inicio de la temporada en tierra batida, donde espera seguir ampliando su racha de triunfos consecutivos (62), se convirtió en un lastre demasiado pesado para un equipo español que, además, ante la superficie elegida por el combinado estadounidense, estuvo siempre dominado por el pesimismo ante el reto a superar.
