Feliciano López prolonga sus buenas sensaciones en Madrid, y Karlovic y su saque apean a Novak Djokovic
MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El tenista español Rafael Nadal acaricia uno de los escasos objetivos que le restan en una superlativa temporada, asegurar el más alto escalafón del ránking hasta 2009, después de mejorar su versión ante el francés Richard Gasquet, que nunca le ha ganado, y situarse en la ronda de cuartos de final del Masters Series de Madrid junto a otros actores de lujo como el argentino Juan Martín del Potro, el suizo Roger Federer o el británico Andy Murray.
Nadal avanza con paso firme, exhibiendo ese gen competitivo tan particular, y ya está en cuartos donde se cruzará con su compatriota Feliciano López, asegurando así la presencia de un integrante de la 'Armada' en la jornada de semifinales del sábado.
El balear, que se ausentó del dobles por precaución, no acusó las molestias en la zona del glúteo e intimidó desde el inicio al Gasquet, al que ha vencido en las seis ocasiones que se han enfrentado. Le hizo un 'break' de salida para minar la confianza del francés, algo tan habitual en la trayectoria del de Manacor que parece hasta sencillo.
La fuerza de Nadal y la candidez de Gasquet, que no aprovechó su punto de rotura en el juego siguiente, se aunaron para que el español dominara siempre el marcador. Sin grandes alardes, regulando el esfuerzo y aprovechándose de un rival de guante blanco al que le falta responsabilidad consigo mismo en las rondas importantes, Nadal marchó directo hacia el triunfo parcial en la primera manga por 6-4.
Ya no hubo más concesiones por parte del número uno mundial y la segunda manga la cerró por 6-2 para citarse con un Feliciano López que disfruta de su particular idilio con la capital. El toledano igualó su mejor resultado en Madrid, los cuartos de 2003 y 2007, ante el suizo Stanislas Wawrinka por un doble 6-4.
'Feli' exhibió el poderío de su servicio, con el que no cedió ni una sola pelota de 'break' para sumar puntos importantes pensando en la final de la Copa Davis del próximo mes de noviembre. El bajón, reconocido, del alicantino David Ferrer y los buenos resultados del zurdo en Viena o ahora en Madrid podría hacer recapacitar a Emilio Sánchez Vicario.
Feliciano López es consciente de que acude al encuentro como víctima, pero dispuesto a "plantar cara" a Nadal en una pista en la que su tenis se iguala en parte. El toledano está exigido a lucir su mejor saque para dar batalla a un Nadal extramotivado porque el triunfo le daría el número uno mundial hasta 2009. Previamente el manchego ofreció su mejor versión ante Wawrinka. Con nueve 'aces' amedrentó a su rival y además no concedió pelota alguna de 'break'.
El pupilo de Albert Costa ha ido puliendo su tenis en los últimos años y hoy salió al ataque, consciente de que no podía dar opciones al suizo, oro en dobles en Pekín junto a Federer, lo que le permitió obtener pronto las primeras rentas. Después de apuntarse la primera manga, no tuvo problemas para encarrillar la segunda ante la impasividad del helvético.
FIRMEZA DE FEDERER Y ESPECTÁCULO DE DEL POTRO
Roger Federer, mientras tanto, asaltó una ronda más aprovechándose de la irregularidad del francés Jo-Wilfried Tsonga en apenas una hora de juego. El encuentro apenas requirió esfuerzo del número dos mundial porque el galo evidenció la irregularidad propia de quien lleva una temporada con grandes altibajos como consecuencia de las lesiones.
Federer, que tampoco estuvo demasiado acertado en su juego, resolvió un compromiso que le sitúa en cuartos frente a un partido que promete emociones fuertes ante el emergente Juan Martín del Potro, quien seguramente le exigirá mayor esfuerzo.
Ambos jugadores se han enfrentado en dos ocasiones, la temporada pasada, pero entonces Del Potro estaba todavía en crecimiento y ahora ya parece un jugador predestinado a luchar por títulos en la ATP, como demostró este verano en Stuttgart, Kitzbuehel, Los Ángeles o Washington.
Fue un partido que alternó luces y sombras, errores y aciertos por igual en ambos bandos hasta que en el momento decisivo Tsonga se deshizo, Federer aprovechó las concesiones y el partido se resolvió de la manera más lógica por 6-4 y 6-1.
Ante Del Potro, el helvético, siete años mayor, necesitará recurrir a su mejor tenis para salvaguardar su presencia en semifinales porque el argentino es agresivo, descarado y disfruta de su mejor pico de forma de la temporada, junto al que ya aprovechó durante su particular gira veraniega, en la que se apuntó los títulos de Stuttgart, Kitzbuehel, Los Ángeles y Washington.
Del Potro recogió el testigo de su compatriota David Nalbandián. El joven argentino ofreció un recital para acceder a cuartos. El de Tandil se impuso a su compatriota por 6-4 y 6-2 en un partido en el que lanzó un aviso a la 'Armada' de cara a la próxima final de la Copa Davis, que se disputará en pista dura, ya que los asistentes al encuentro presenciaron un auténtico espectáculo entre dos magos de la raqueta.
Del Potro, que ha encadenado cuatro títulos este año, sigue con su progresión y hoy se cobró una nueva víctima. Su envergadura le permite presumir de un saque endiablado -con servicios de hasta 220 kilómetros por hora y ocho 'aces' en el partido- y es capaz de mover a su adversario por toda la pista.
Por otra parte, el escocés Andy Murray tiró de experiencia para supera al croata Marin Cilic por 7-5 y 7-6(2). El número cuatro del mundo tuvo que emplearse a fondo para superar a un correoso Cilic, que llegó a sacar para llevarse el primer set (5-4), pero que pecó de inocencia. Ahora, el finalista del pasado Abierto de Estados Unidos se medirá en cuartos de final al americano Gael Monfils, que se impuso a su compatriota Andy Roddick.
PASO ADELANTE DE SIMON
La ronda de cuartos se cierra con el choque entre el francés Gilles Simon y el croata Ivo Karlovic . El galo derrotó al estadounidense Robby Ginepri y se mantiene en liza por una plaza para la Copa Masters de Shanghai. Simon acabó con el último superviviente de la fase previa tras un duro partido que se resolvió por 6-7(6), 6-4 y 7-6(6) tras dos horas y 36 minutos de juego.
Karlovic, por su parte, hizo bueno su extraordinario servicio para dejar fuera a un Djokovic desesperado ante la falta de ritmo de su partido frente al gigantón croata, temido en el circuito. Sus 22 'aces' y su fortuna en la muerte súbita, en la que ha ganado los cuatros sets disputados hasta ahora en Madrid, fueron suficientes para apear a un Djokovic que no encuentra la manera de sobresalir en la capital.
