"Mañana es el partido fuerte de la temporada"
MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
La tenista belga Justine Henin se mostró muy satisfecha por clasificarse por segundo año consecutivo para la final del Sony Ericsson Championships, donde defenderá mañana su cetro, y espera una gran oposición por parte de la rusa Maria Sharapova, ganadora en 2004.
"Digamos que soy la número uno del mundo. Todo el mundo quiere ganarme, lo acepto. Quiero preparar el partido lo mejor posible y llegar en buenas condiciones", afirmó al tiempo que considera que Sharapova llega en un gran momento de forma, superadas ya las molestias en el hombro.
La de Lieja confía en dar un gran espectáculo en el último duelo del año tenístico. "No hace falta decir que mañana es el partido fuerte de la temporada. Estoy triste porque se acaba. He vivido muchas cosas y esto quiere decir que tengo muchas cosas que hacer en el circuito, han sido buenos tiempos", indicó.
Para vencer a Sharapova, asegura que la clave será "mental". "Es una chica que conozco bien. La he ganado, me ha ganado y vamos a luchar por ganar el Masters. Ha vivido la presión y ha vuelto a su mejor nivel. Ha llegado aquí sin partidos jugados. Pero yo estoy muy motivada por ganar un segundo Masters y acabar de una forma positiva", añadió al tiempo que no quiso valorar si la rusa es la más fuerte mentalmente del circuito.
Henin confía en repetir el resultado del último duelo entre ambas, en semifinales del pasado Masters femenino. "No lo había pensado, el partido llega en un contexto muy particular. El año pasado nos jugábamos el número uno del mundo entre Amelie (Mauresmo), Sharapova y yo. Este año no nos hemos cruzado. Mañana espero un buen partido y se lo llevará la mejor", sentenció.
"ES EL ÚLTIMO ESFUERZO"
Además, no le da importancia al hecho de poder sumar mañana su vigésimo quinta victoria consecutiva. "Eso es algo de la prensa. Juego la final y es el último esfuerzo. Intentaré ganar el último partido de una buena temporada. Nunca he conseguido ganar 25 partidos seguidos y me gustaría. Pero estoy algo triste porque es una temporada llena de buenos recuerdos", apostilló.
Por otra parte, reconoció que había sentido "presión" en los primeros juegos ante Ana Ivanovic. "Perdí la concentración momentáneamente, pero en cuanto tuve aire lo cogí. Ella hizo un buen partido aunque tuvo altibajos. He podido jugar bien los puntos importantes y estoy muy contenta de estar en la final por segunda ocasión", explicó.
Así, no dudó en elogiar a la joven serbia. "Al principio fue un nivel de tenis muy elevado. Ha sido una rival seria, pero he reaccionado bien. Hubo momentos en que sentí un poco de miedo, perdí intensidad, pero he hecho un buen tenis. He jugado con calidad y estoy muy satisfecha", confesó.
En otro orden de cosas, restó importancia a las dobles faltas ya que son consecuencia de "tomar riesgos". "Con el segundo saque no juego para evitar errores, sino para ganar y presionar a la otra", resumió.
Por otra parte, hizo balance de una temporada "difícil". "Ha habido muchos momentos importantes. He crecido mucho. Ganar en Roland Garros fue muy importante para mí porque me dio motivación. Mi derrota en Wimbledon fue muy dolorosa, pero me dio humildad que es lo que necesitas para ser mejor y me ayudó a ganar el US Open, eso me dio energía", indicó.
Por último, espera mantener el número uno el "mayor tiempo posible". "Ahora lo que importa es el título. Si tengo salud y gano, seguiré siendo número uno. Pero este año ha sido muy difícil para mí a diferentes niveles, después intentaré encontrar las fuerzas para seguir", finalizó.
