MADRID, 29 sep. (EDIZIONES)
Gremlin es el nombre del gato de una pareja de Sídney, Australia, cuyo aspecto encajaría perfectamente con el concepto de mascota terrorífica y como símbolo de Halloween.
El minino es un gato persa exótico de pelo corto y negro, tiene una lengua que sobresale y dos ojos redondos de color anaranjado que van acentuándose más a medida que envejece.
Así lo ha contado a Caters su dueña, Chloe Harrison, de 30 años, quien se encarga de gestionar junto a su pareja una cuenta en Instagram donde comparte fotos y vídeos de Gremlin.
En una entrevista para Bored Panda, la pareja contó que cuando lo llevaron a casa no se imaginaron que el gato fuera a cambiar el color de sus ojos como lo ha hecho a medida que se ha ido haciendo mayor.
Cuando era pequeño -en diciembre cumplirá dos años-, sus ojos eran de un tono mucho más pálido.
Al margen de su aspecto, Gremlin es un gato cariñoso y sociable al que le encanta hacer compañía a sus dueños mientras trabajan y, en palabras de sus dueños, es quien "les ha mantenido cuerdos" durante las semanas de cuarentena en Melbourne.