EDIZIONES, 3 Jul.
El cierre definitivo de Toys 'R' Us en Estados Unidos tras 70 años de actividad se daba a conocer hace unos días por la compañía de juguetes al reconocer la bancarrota. El haber cerrado preventivamente en enero 182 de sus establecimientos no fue medida suficiente para evitar el desenlace.
En mitad de este amargo final, cuando algunas tiendas colgaban los carteles de "se alquila local", una de ellas, la de Raleigh, Carolina del Norte, fue testigo de un acto sorprendente de solidaridad inesperada.
Un cliente, cuya identidad se mantiene en el anonimato, acudió a la tienda y desembolsó un millón de dólares para comprar los juguetes que quedaban en la tienda con el objetivo de repartirlos entre los niños sin recursos.
En lugar de afrontar el último viernes de atender al público y encargarse de las cajas registradoras, los empleados de Toys 'R' Us se vieron empaquetando juguetes y vaciando estanterías para llenar cajas y más cajas.
La de Raleigh no fue la única, según un empleado de esta tienda, el misterioso comprador visitó otros establecimientos de la cadena: "No sucedió todo en esta ubicación. No tenemos mucho inventario. Sucedió en varias tiendas".
En cuanto a su identidad se ha formado mucho revuelo, aunque no hay indicios de que se vaya a dar a conocer. No obstante, el gesto de repartir todos estos juguetes a los niños más necesitados ha sido muy aplaudido por todos.
