Actualizado 18/06/2019 20:50

Carrera de sillas de oficina, 'pilla pilla' para atletas y otras de las competiciones más curiosas del mundo

Carrera de sillas de oficina, 'pilla pilla' para atletas y otras de las competiciones más curiosas del mundo
Carrera de sillas de oficina, 'pilla pilla' para atletas y otras de las competiciones más curiosas del mundo - EUROPA PRESS

MADRID, 17 Jun. (EDIZIONES) -

¿Carrera de sillas de oficina? ¿De patos? ¿'Pilla pilla' para atletas? De Japón a España, pasando por Estados Unidos (EEUU), Reino Unido o Finlandia, este es un pequeño recopilatorio de los campeonatos más curiosos a nivel mundial.

  • La Carrera de resistencia con sillas de oficina (Kioto, Japón)

La competición ISU-1 se basa en una carrera de relevos con sillas de oficina en la que equipos formados por tres personas --una de ellas ejerce como capitán-- se enfrentan para ver quién da más vueltas al circuito durante un determinado periodo de tiempo: 60 o 90 minutos, dependiendo de la marca que haya conseguido cada grupo en las rondas clasificatorias.

La ISU-1 nació en 2010 en Kioto (Japón), aunque en menos de una década se ha expandido a varios puntos del país y del extranjero, llegándose a celebrar eventos similares en China, Taiwan, Singapur y Malasia. El único requisito para participar en la ISU-1 es tener más de 18 años y cumplir los requisitos, como ir a los servicios médicos si uno resulta herido: la organización del evento proporciona a los concursantes sillas rodantes y elementos de protección (cascos, rodilleras, etc.).

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  • La competición de Air Guitar de Oulu (Finlandia)

El 'Air Guitar' es una forma de baile en la que uno pretende estar tocando la guitarra eléctrica sin tener ningún instrumento en las manos (el entusiasmo está muy valorado en esta disciplina: se recomienda hacer 'Air Guitar' como si uno fuera el mejor guitarrista de la historia).

Cada año desde 1996, se decide quién es el mejor 'air guitarist' a nivel global en Oulu (Finlandia). El certamen finlandés se celebra en agosto --la de 2019 se celebrará entre los días 21 y 23 de ese mes-- y viene precedido de varios campeonatos a nivel nacional (actualmente, estos tienen lugar en Australia, Canadá, Dinamarca, Francia, Alemania, Islandia, Japón, Corea del Sur, Ucrania, Reino Unido y Estados Unidos (EEUU).

  • La carrera de impulso del edificio Empire State (Nueva York, EEUU)

La maratón de Nueva York (EEUU) es el más conocido, pero no el único gran certamen en el que uno puede participar en la ciudad. En la carrera de impulso del Empire State se compite no ya por rodear la Gran Manzana, sino por coronar uno de sus edificios más conocidos: los corredores deben llegar en el menor tiempo posible al final de los 1.576 escalones. La competición se celebra desde 1977.

       Reuters

  • El Campeonato mundial de 'Chase Tag' o 'Pilla pilla'

El 'Chase Tag' es la forma más profesional del clásico juego del 'Pilla pilla': dos equipos de cinco personas como máximo se enfrentan de dos en dos en un 'cuadrilátero' de 12 metros cuadrados repleto de obstáculos, cambiándose en cada ronda --que dura 40 segundos-- los roles de 'perseguidor' y de 'perseguido'. Se alza como vencedor quien gane más rondas.

La modalidad del clásico juego fue inventada por dos hermanos en 2011, después de que uno estuviera jugando una tarde con su hijo al 'Pilla pilla' en el patio trasero de su casa. Se celebran eventos de 'Chase Tag' en varias partes del mundo: Reino Unido, Francia, Estados Unidos (EEUU), Canadá, Colombia, India, China y Japón.

  • La 'Estropatada' o carrera de patos de Bilbao

La 'Estropatada' bilbaína es una competición de patitos de juguete en el río Arga. Adquiriendo un 'ticket' uno tiene derecho a obtener uno de los patitos participantes geolocalizados que se lanzan desde el puente Euskalduna (e incluso a ponerle un nombre, si uno lo desea).

La competición tiene como objetivo recaudar fondos para una ONG: 'The Walk On Project', organizadora del evento, promueve la divulgación y la financiación de proyectos sobre enfermedades neurodegenerativas. En esta última edición, se han sustituído los patos de goma por piñas de pino pintadas para reducir el volumen de plástico que acaba en los ríos.

  • El campeonato de salto desde el puente de Mostar (Bosnia Herzegovina).

La competición de salto de Mostar (Bosnia Herzegovina) comenzó como un rito de iniciación en la edad adulta para los jóvenes de la región en el siglo XVI y es, desde 1968, una competición en la que cada año se reúnen clavadistas profesionales para lanzarse sobre el río Neretva desde una altura de 29 metros.

El certamen forma parte del campeonato mundial de salto de altura de Red Bull, que cuenta con siete certámenes distintos a lo largo del año, todos con las mismas reglas y el mismo funcionamiento. Gana el concursante que obtenga la calificación más alta una vez acabada la competición. 

El certámen se celebra durante dos días en los que los participantes llevan a cabo cuatro saltos diferentes, que han debido presentar con antelación al jurado, conformado por cinco personas. De las cinco valoraciones diferentes, se desestiman la más alta y las más baja, se suman las tres restantes y el resultado se multiplica por los puntos de dificultad del salto que el participante hubiese decidido llevar a cabo.

La competición data prácticamente de la época en la que se construyó el puente en el que tiene lugar: el Stari Most (el 'puente viejo'), que fue destruído en 1993 durante la Guerra de los Balcanes, reconstruído en 2004 e incluído en 2005 en la lista de Bienes Culturales Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO

  • El Boloencierro de Mataelpino (Madrid)

España no tiene nada que envidiar a ningún país en cuanto a fiestas y competiciones peculiares. Buen ejemplo de ello es el 'Boloencierro' de Mataelpino (Madrid), donde los toros son sustituidos por una gran bola de espuma de 250 kilogramos de la que hay que huir corriendo por el recorrido marcado.

La bola de espuma fue solución que aplicó el pueblo en 2011 cuando el presupuesto no les permitió tener su propio encierro con toros. Hay una versión para adultos, con una edad mínima de participación de 16 años, y otra para niños, aunque también se puede observar el encierro desde la talanquera si uno no desea participar. Un hombre de 29 años resultó herido grave en la última edición.