MADRID, 14 oct. (EDIZIONES)
Ronald Raasch y Nils Baadness se encontraban buceando con miembros del equipo de investigación REV Ocean en las afueras de rsta, Noruega, cuando ante sus ojos descubrieron una misteriosa forma de 17 metros en las profundidades del agua.
El extraño saco transparente de grandes dimensiones que flotaba en la oscuridad de un fiordo ha resultado ser una masa gigante compuesta de huevos de calamar.
No pasó mucho tiempo del hallazgo hasta que supieran de qué se trataba, y así lo hacían saber en su cuenta de Twitter.
Lo extraño de estas formaciones es que sean fácilmente visibles para los humanos porque tienden a colocarse en aguas más profundas, para luego hundirse lentamente más y más, a unos 150 metros donde, finalmente, nacen los calamares.
La ciencia todavía no sabe con certeza el motivo exacto por el que las diferentes especies de calamares -no todas- producen esta enorme masa de huevos, a veces de varios metros de diámetro, dentro de la cual se pueden incubar hasta 40.000 huevos.
Se cree que estos animales ponen sus huevos protegidos por una gran masa mucosa que se junta a otras ya puestas formando estas esferas gigantes. También se conocen especies que insuflan aire a estas masas para hacerlas más grandes. Por lo que la protección contra los depredadores parece ser uno de los principales propósitos.
De hecho, en un artículo publicado en el año 2012, los biólogos marinos que intentaron criar calamares en un laboratorio usando la fecundación 'in vitro' descubrieron que los animales eran propensos a la infección y morían en cuestión de horas.
A pesar de las incógnitas que rodean a todo este proceso de cría de los calamares, el espectáculo de ver estas enormes masas transparentes creando vida no deja de ser fascinante.