El consumo de cemento aumentó un 8,4% en febrero

Alumnos visita fábrica de cemento
EUROPA PRESS/FLACEMA
Actualizado: miércoles, 16 marzo 2016 9:37


MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -

El consumo de cemento aumentó un 8,4% en febrero, hasta situarse en 891.297 toneladas, 69.076 toneladas más que en el mismo mes del pasado año, recuperando la tendencia de crecimiento con que cerró 2015 y que se quebró en enero, según la patronal del sector Oficemen.

Tras la caída del 1,1% registrada en enero, el consumo acumulado de los dos primeros meses del año se eleva a 1.638.713 toneladas, lo que supone un incremento del 3,9% con respecto al mismo período de 2015.

Estos datos coinciden con las previsiones de Oficemen para 2016, año en el que espera un crecimiento del orden del 7%, aunque con fluctuaciones a lo largo de los meses. "Aún así, seguimos en niveles mínimos de consumo, por lo que debemos continuar ofreciendo alternativas que potencien nuestra industria", ha afirma el director general de Oficemen, Aniceto Zaragoza.

En este sentido, el sector cementero aboga por soluciones sostenibles que, además, permitan su recuperación, como el impulso de la rehabilitación energética de edificios propuesto en el Plan Crecimenta 20-30.

Dicho plan presenta 25 medidas tendentes a incrementar la producción y venta de cemento a partir de "propuestas compatibles con el actual contexto de contención presupuestaria" y que, además, asegura permitirán generar unos 7.000 puestos de trabajo.

Desde Oficemen se recomienda la utilización de envolventes de hormigón en edificios, un material que, gracias a su elevada inercia térmica, permite ahorrar hasta 4 recibos de luz y gas por vivienda y año. A juicio de la patronal, esto supone no solo un considerable ahorro económico y energético, sino también una importante reducción de emisiones y una mejora de la habitabilidad.

El consumo de cemento cerró 2015 con un crecimiento del 5,3%, hasta sumar 11,40 millones de toneladas y encadenó así su segundo ejercicio al alza.

La patronal considera no obstante que se trata de un volumen de demanda similar al que se registraba a mediados de los años sesenta y un 54% inferior al consumo medio de 25 millones de toneladas anuales que el cemento registró en los últimos 25 años.