Econonomía/Vivienda.- La Asamblea por una Vivienda Digna demanda "un cambio de enfoque a políticas de alojamiento"

Actualizado: jueves, 31 mayo 2007 21:28

MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -

El portavoz de la Asamblea contra la Precariedad y por una Vivienda Digna, Daniel Jiménez, declaró hoy, en relación al informe presentado por el Observatorio Joven de Vivienda en España (Objovi), que en España "hace falta un cambio de enfoque hacia políticas de alojamiento" que deje atrás la "obsesión" por la propiedad.

Según declaró Jiménez a Europa Press, en España existe un "problema de enfoque" a la hora de abordar el acceso a la vivienda porque éste sólo se contempla desde el punto de vista de la propiedad.

Esta "trampa del sistema puede verse incluso en el planteamiento del Objovi, que sólo se interesa por el porcentaje del salario que los jóvenes tienen que destinar para comprar una vivienda y no para alquilarla".

A juicio de la Asamblea, los poderes públicos han "fracasado estrepitósamente" en la aplicación del Artículo 47 de la Constitución Española que les atribuye la responsabilidad de garantizar el acceso universal a una vivienda digna porque no han comprendido que "no se trata sólo de abaratar el precio de la vivienda ni de hacer vivienda social".

"Muchas veces con esas políticas de crear muchas viviendas protegidas se descuidan otros equipamientos sociales que hacen falta, como ocurre en la Operación Campamento de Madrid, cuando lo que se debe hacer es ver a los jóvenes no como propietarios, sino como personas que necesitan tener acceso a un alojamiento digno que no necesariamente tiene que ser en propiedad", declaró Jiménez.

En este sentido, incidió en que construir no es la solución mientras no se reparta lo construido y hoy, "teniendo las viviendas más altas de Europa en comparación con los salarios" y "habiendo construido en un año 800.000 viviendas", lo cierto es que "hay sobreabundancia de viviendas".

Pese a ello, prosiguió el portavoz de la Asamblea, no se produce una caída de los precios porque "los poderes públicos han generado e impulsado la especulación urbanística", y ahora "el precio de las viviendas no corresponde al ritmo de mercado ni se ajusta a las leyes de la oferta y la demanda".