MADRID, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Asociación de Promotores de Madrid (ASPRIMA), Rafael Santamaría, afirmó hoy que "no existe una mafia en el negocio inmobiliario de una forma generalizada". "Sale un caso de estos y nos damos cuenta de que estas cosas ocurren, pero puedo asegurar que la inmensa mayoría de los promotores inmobiliarios y de las administraciones públicas actúan dentro de la más estricta legalidad", aseguró.
En declaraciones a Europa Press TV, Santamaría dijo que la trama de corrupción descubierta en Marbella, en la que estaban implicados algunos promotores inmobiliarios, es un "hecho deleznable que perjudica no sólo a Marbella, sino a toda la Costa del Sol" y abogó por que sus responsables sufran "todo el peso de la ley". Aún así advirtió de que el comportamiento delictivo de los imputados "no debe generalizarse a la totalidad de los promotores".
El presidente de los promotores inmobiliarios madrileños quiso dejar claro que lo sucedido en Marbella es "un caso puntual" que no atañe al resto de trabajadores del sector, aunque añadió que "si después resulta que existen otros casos, ya se irán conociendo, pero yo quiero creer que esto es un caso puntual".
En este sentido, Santamaría subrayó que no se debe pensar que la corrupción y los escándalos son patrimonio exclusivo del negocio inmobiliario. "Un caso como éste puede pasar en los promotores inmobiliarios, puede pasar en los políticos y puede pasar en cualquier tipo de profesión", apuntó.
Preguntado sobre cómo ha podido permanecer oculto una trama de estas magnitudes durante tanto tiempo dentro del sector inmobiliario, el presidente de ASPRIMA afirmó que "es deber de las administraciones velar para que las leyes se cumplan", y afirmó no conocer "qué grado de conocimiento tenían las distintas administraciones del asunto". "Ahora, quien debe actuar es la justicia", concluyó.
