BARCELONA, 2 May. (EUROPA PRESS) -
La Generalitat aumentó en 148 el número de alojamientos para los temporeros de las Terres de l'Ebre (Tarragona) en 2005, consiguiendo duplicar la cifra a un total de 296 plazas, a través de ayudas apra construir y rehabilitar viviendas.
El proyecto recibió en toda Catalunya una inversión de 1.238.913 euros, de los que 377.651 euros se destinaron a esta región, según informó hoy la Delegación Territorial del Govern en la zona.
Las ayudas tienen como objetivo garantizar unas condiciones laborales y de alojamiento dignas para los trabajadores de temporada, procedentes mayoritariamente de los países del este y de Colombia, durante su estancia en Catalunya, junto con la intención de favorecer la contratación en origen y la ordenación de flujos migratorios.
El delegado del Gobierno Catalán en la zona, Lluís Salvadó, destacó la inversión de 50 millones de euros destinados a una nueva construcción de la cooperativa Soldebre de Roquetes.
El proyecto contempla tanto la construcción de nuevos alojamientos como la rehabilitación de los mismos. La Conselleria de Bienestar y Familia destinó en 2005 una cantidad de 1.800 euros a cada alojamiento construido y 1.500 euros por cada vivienda rehabilitada --300 euros más que en 2004--.
Los ayuntamientos, asociaciones, mutuas, cooperativas y las personas jurídicas que promuevan la construcción, rehabilitación, reformas, ampliación o acondicionamiento pueden acogerse a estas ayudas.
AUMENTO DE LA DEMANDA DE TEMPOREROS EN EL FUTURO.
En las Tierras de l'Ebre existen ya cuatro proyectos en funcionamiento, uno en Benissanet, con 48 plazas; otro en Batea, con 50 plazas; otro en Corbera d'Ebre, con 28 plazas, y otro en Miravet, con 22 plazas. Según los datos de la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca, se necesitan 3.965 temporeros en las Terres de l'Ebre.
El sector agrícola de las Terres de l'Ebre se encuentra dividido en cinco grandes áreas, los cítricos, la viña, la fruta dulce, el olivar y el mejillón. El sector con mayor demanda de temporeros es el de los cítricos, que cuenta con una superficie total de cultivo de 2.590 hectáreas.
Según la Conselleria de Agricultura, Ramaderia y Pesca, en cuatro o cinco años se prevé que incremente la demanda de temporeros en un 5%, concretamente en el Baix Ebre y Montsià, debido a que las plantaciones de cítricos llegarán al nivel óptimo de producción.
La demanda de temporeros se triplicará en un plazo de entre cinco y diez años si se produce la intensificación del cultivo y la entrada en funcionamiento del riego en la Terra Alta.
