La compañía confía en mantener los proyectos en regasificación
MADRID, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Enagás, Antonio González-Adalid, estimó hoy que conocerá a principios de febrero el impacto del nuevo marco regulatorio sobre la retribución de actividades gasistas, aunque confió en mantener los proyectos previstos.
En una conferencia con analistas, González-Adalid recordó que las órdenes ministeriales que fijan la nueva norma fueron publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el sábado por la mañana, y la compañía "ha estado trabajando todo el fin de semana para evaluar el impacto", aunque todavía no se ha podido concluir un análisis detallado de la incidencia en cada uno de los proyectos.
Así, el presidente de Enagás calculó que "en tres o cuatro semanas" la compañía habrá analizado de forma precisa el nuevo marco regulatorio, con lo que se podrá conocer la incidencia del mismo para más allá del 2007.
No obstante, consideró que las características de estas normas ministeriales permiten mantener los proyectos en regasificación y entendió que si hubiera algún problema específico para alguna de las plantas se podría solucionar a través de conversaciones con el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
Preguntado sobre si la compañía mantendrá la planta regasificadora de El Musel (Gijón), González-Adalid se limitó a señalar que este proyecto es muy importante para el sistema, aunque resaltó que "seguro que se hará".
En este sentido, también reconoció haber mantenido conversaciones con HC Energía (Hidrocantábrico) para que entre a formar parte de este proyecto, aunque destacó que tomarán la decisión definitiva a largo plazo, dado que todavía hay tiempo hasta que la planta se ponga en marcha. "A lo largo de 2007 iremos viendo", dijo.
Enagás negó que haya habido una negociación bilateral con Industria y aseguró que se trata de una norma consensuada a través del consejo consultivo de hidrocarburos, el consejo de administración de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) y otros operadores del sistema.
A preguntas sobre la diferencia entre la propuesta inicial de la retribución, mucho menos favorable para Enagás, y la norma finalmente aprobada, González-Adalid indicó que se ha aumentado en 50 puntos la tasa interna de rentabilidad y se ha variado algunos aspectos técnicos de costes, así como la vida útil de algunos activos.
Asimismo, explicó que el nuevo sistema retributivo que se establece para los activos de regasificación y almacenamiento subterráneo supone un acercamiento a los criterios retributivos vigentes en la mayor parte de países europeos.
González-Adalid sostuvo que la retribución se calcula a partir de inmovilizado neto y la tasa de remuneración se fija a partir del coste medio de financiación de referencia de las compañías, a las que se añade un diferencial que puede variar en función de diferentes variables.
En su opinión, las ordenes publicadas reflejan la voluntad del regulador de orientar sus decisiones a asegurar a los titulares de instalaciones una tasa interna de rentabilidad, nominal y después de impuestos, que supere entre 200 y 300 puntos básicos a su coste medio de financiación de referencia.
INCIDENCIA EN LA RENTABILIDAD.
Además, aclaró que el sistema de retribución de los activos de transporte por gasoducto no se ha visto modificado por estas nuevas ordenes, por lo que siguen siendo remunerados en función del inmovilizado bruto.
No obstante, señaló que las normativas establecen nuevos costes estándares de inversión y se ha introducido un elemento corrector, para que, a través de una fórmula, penaliza la retribución de los gasoductos a medida que aumenta su longitud, lo que, a su juicio, puede dificultar la obtención de una rentabilidad adecuada en algunos casos.
