MADRID, 2 May. (EUROPA PRESS) -
Miguel Antoñanzas, actual presidente de Viesgo, se perfila como el futuro consejero delegado de Endesa, mientras que la presidencia la asumirá, como estaba previsto, José Manuel Entrecanales, una vez culmine con éxito la oferta pública de adquisicón (OPA) formulada por Enel y Acciona sobre la eléctrica a 41,3 euros por acción, informaron a Europa Press en fuentes del sector.
Se descarta así que Fulvio Conti, consejero delegado de Enel, ejerza también de 'hombre fuerte' en la primera eléctrica española. De este modo, se despeja una de las principales incógnitas que pendían del acuerdo alcanzado a primeros de abril entre ambas empresas para repartirse el control de Endesa.
Esto implicará la salida de la eléctrica de Manuel Pizarro y de Rafael Miranda, actuales presidente y consejero delegado de la compañía.
Así, de acuerdo con el organigrama tentativo que maneja el tándem Enel-Acciona, no sólo el presidente, sino también el primer ejecutivo de la futura Endesa tendrán nacionalidad española, lo que coincide con la apuesta del Gobierno por encontrar una "solución española" para la primera eléctrica del país.
Antoñanzas preside actualmente Viesgo, empresa cántabra que Enel compró a Endesa en enero de 2002 y que acaba de salir de la lista de operadores principales del sector eléctrico que publica la Comisión Nacional de la Energía (CNE), allanando así el camino a que el grupo italiano pueda ejercer los derechos políticos correspondientes a su participación del 24,9% en Endesa.
Viesgo, que cuenta con una plantilla de más de 1.000 personas y opera en España en los mercados liberalizados de generación y comercializacion y regulados de distribución de energía eléctrica, forma parte de los activos que Enel ha acordado traspasar al grupo alemán E.ON una vez culmine la OPA.
La compañía tiene un parque instalado de 2.365 megavatios (MW) --40% centrales de carbón, 32% en fuel gas y 28% en centrales hidraúlicas y de bombeo--, en plantas ubicadas en las comunidades de Andalucía, Aragón, Asturias, Cantabria, Castilla la Mancha, Castilla León y Cataluña.
Además, Miguel Antoñanzas preside Enel Unión Fenosa Renovables, la empresa de energías renovables participada por ambos grupos al 50%. La empresa que preside Pedro López Jiménez, que dispone de un derecho de tanteo sobre la participación de su socio, ha expresado ya su disposición a ejercerlo si el grupo italiano decide desprenderse de este paquete cuando se haga con Endesa.
NOTIFICACIÓN A CNE Y A CE EN PRÓXIMOS DÍAS.
Acciona y Enel, que poseen ya el 46% del capital de Endesa, notificarán en los próximos días a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) y a la Comisión Europea (CE) la operación ya presentada en abril a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El organismo regulador de los mercados energéticos debe publicar en el plazo de un mes un informe, que tiene carácter vinculante, para determinar si la operación tiene o no consecuencias negativas para las actividades reguladas. Por su parte, la CE debe establecer si la adquisición afecta a la competencia, al tener dimensión comunitaria.
El viernes 27 de abril el Gobierno autorizó a Enel a ejercer plenamente los derechos de voto en Endesa conforme a su participación del 24,9%, imponiendo la "única" condición de que informe siempre al Ejecutivo sobre su estrategia corporativa, "en aspectos que exclusivamente afectan a intereses esenciales de seguridad pública españoles".
El Gobierno ha seguido el informe de la CNE, aunque de las cinco recomendaciones del organismo regulador, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero tan sólo aplicará la obligación de informar sobre la estrategia corporativa.
El grupo italiano debe garantizar que su entrada en Endesa no perjudicará los intereses nacionales, que son los de mantener la calidad del suministro o que no se pongan nunca en riesgo las inversiones definitivas.
Para tomar esta decisión el Gobierno, tras valorar la operación y teniendo en cuenta el informe de la CNE al respecto, ha tenido en cuenta "la necesidad de impulsar una política energética que sea consecuente con las directrices de la Unión Europea en lo referente a la eliminación de las trabas a la libre circulación de capitales", así como la obligación de "garantizar el suministro de la energía a los ciudadanos".
Aunque se exime a Enel de la norma conocida como 'Ley Rato', que restringe al 3% el peso político de las empresas extranjeras con capital público en compañías españolas estrategicas y se le reconoce el ejercicio de derechos políticos hasta el 24,9% que posee en Endesa, Enel tiene la obligación de comunicar en un futuro la adquisición de acciones por encima del citado límite.
