SEVILLA, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -
La dirección de Panrico lamentó la "alta tasa de absentismo" en la plantilla de Donuts en Sevilla, cifrada en un 12 por ciento, un porcentaje que pretende reducir al cuatro por ciento aplicando una serie de medidas "restrictivas", algo rechazado por los trabajadores.
Según indicaron a Europa Press fuentes de la negociación, esta elevada tasa de absentismo es uno de los principales problemas expuestos hoy por los representantes de Panrico en la reunión con el comité de empresa para buscar una salida a la factoría y los trabajadores de Donuts en la capital hispalense.
Sobre este tema, los trabajadores apostaron por "premiar a los trabajadores que no tengan absentismo para lograr reducir esas cifras, en vez de penalizar a los que incumplan con la jornada laboral".
Otros de los asuntos más "espinosos" planteados por la empresa son la congelación de la antigüedad, algo rechazado por los trabajadores, así como la salida de 80 empleados debido a la aplicación de las nuevas tecnologías, a través de prejubilaciones científicas, dos aspectos que siguen en negociación y que no han sido cerrados por las partes.
Además la empresa planteó el establecimiento de nuevas categorías profesionales y una serie de cuestiones en torno al calendario, las vacaciones y la jornada laboral, que están aún pendientes de discutirse.
Tras la reunión de hoy la empresa quedó en redactar un documento de negociación "que pueda servir de partida para negociar de forma real", indicaron fuentes de los sindicatos, que indicaron que actualmente "se dan avances lentos y sus propuestas no difieren de lo que ya venían planteando, algo normal en estos inicios de las conversaciones".
La pasada semana a los trabajadores y la empresa constituyeron una comisión negociadora que debe buscar alternativas al cierre de la planta y al futuro de los trabajadores, un órgano que se crea con la mediación de la Delegación Provincial de Empleo de la Junta.
Los empleados lamentaron que la empresa "nos ha planteado un documento bastante duro en cuanto a condiciones laborales, que supone un retroceso de dichas condiciones e incluye tanto reducción de costes de personal, cambios de jornadas, movilidad o la extinción de 80 contratos y lo presenta como propuesta alternativa al cierre".
La fábrica de Donuts en Sevilla cuenta actualmente con 250 trabajadores y el pasado junio Panrico anunció su cierre, incluido en un Plan de Viabilidad de la empresa que inició su andadura en 1997.
