Economía/Empresas.- El presidente de Mutua Madrileña pide más reconocimiento para la acción social de las empresas

Actualizado: martes, 12 diciembre 2006 21:34

MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Mutua Madrileña, José María Ramírez Pomatta, pidió un mayor reconocimiento para la acción social de las empresas, solicitando además un cambio en materia normativa para que las compañías puedan asumir nuevos compromisos en el campo de la responsabilidad social.

"Son las condiciones favorables de carácter social las que hacen posible el beneficio y las que convierten en un acto de estricta justicia el que la empresa deba moralmente asumir frente a la sociedad, que la acoge, una mayor cuota de responsabilidad social, comprometiéndose a contribuir activamente a su desarrollo estable. De ahí que la empresa deba comprometerse -incluso por su propio interés- con el mantenimiento y desarrollo estable de las 'circunstancias' políticas, económicas y sociales que permiten sus actividades", indicó en su intervención en la clausura del Curso Académico de la Real Academia de Medicina.

Ramírez Pomatta, en un discurso título 'Responsabilidad Social Corporativa e Investigación Médica, lamentó a este respecto la actitud de los que reducen el problema de la responsabilidad social a un simple lavado de cara.

"Esto es a una mera operación de 'marketing' dirigida a mejorar la imagen de las empresas, pero sin que ello se oriente realmente a suponer un cambio real en su filosofía de gestión. Para este sector la responsabilidad social no sería más que una moda pasajera -una frivolidad- que, seguramente -según ellos- no sobrevivirá en el tiempo", destacó.

Ramírez Pomatta también destacó la necesidad de un mayor reconocimiento social a la labor que realizan las empresas en este campo, indicando que España, con un 20%, es unos de los países occidentales donde menor es la preocupación de los ciudadanos por el grado de cumplimiento de los principios de responsabilidad social empresarial, frente al 40% de Francia, el 75% de los japoneses o el 80% de los consumidores estadounidenses.

UNA LEY INTERVENCIONISTA.

Respecto a la legislación vigente, contenida en la Ley de Fundaciones del año 2002, lamentó que no haya servido para promover un cambio de criterio, favorecedor del cumplimiento por las empresas de los compromisos que asuman en el campo de la responsabilidad social y afirmó que debido a sus restricciones "es una ley mojigata, un recelosa, intervencionista y carente de cualquier aliciente en materia fiscal, que parte de la falsa idea de que la actividad privada, la actividad empresarial, únicamente pretende favorecer los intereses privados"

Para Ramírez Pomatta, medalla de honor de la Real Academia de Medicina en 2004 y primera persona no perteneciente al mundo de la medicina invitada por los académicos para clausurar el curso, todo esto "evidentemente dificulta la capacidad de las empresas de llevar a cabo actividades a fines de bienestar social o de interés general".

El presidente de la Mutua Madrileña recalcó que lo que la sociedad civil espera de ese concepto emergente que es la Responsabilidad Social Corporativa es que una empresa se "sienta comprometida con la sociedad de la que forma parte y dispuesta a colaborar en su desarrollo".

Finalmente, Ramírez Pomatta recordó que "la empresa es, ante todo una organización dirigida a la obtención de un lucro, de unos beneficios, de una rentabilidad".

"Si no existe rentabilidad, si no existen beneficios, tarde o temprano la empresa desaparecerá. De ahí que para que las inversiones y actividades que la empresa lleve a cabo en el campo de la responsabilidad social puedan ser perdurables, es necesario que sean rentables o, al menos, económicamente autosuficientes facilitando su viabilidad", concluyó.